La ministra del Trabajo, Ximena Rincón, criticó que los alegatos de la oposición ante el Tribunal Constitucional (TC) contra la constitucionalidad de la reforma laboral no tienen el sustento jurídico necesario.
Este martes se llevó a cabo la segunda jornada de audiencias, en las que participaron los abogados Francisco Tapia y Javier Couso por el Gobierno, mientras que por la derecha los juristas fueron Gastón Gómez y Patrick Ruby.
Tras la discusión, Rincón sostuvo que "cuando uno escucha los alegatos, y lo que uno escuchó el día de ayer, que tengo el reporte completo, claramente hay una oposición a lo que se aprobó porque no gusta lo que se aprobó".
"No hemos escuchado durante la intervención del abogado de los requirientes normas que amparen la inconstitucionalidad. La verdad es que hay un disgusto con lo aprobado legislativamente pero no hay sustento desde el punto de vista constitucional para echarlo abajo", dijo.
Desde la oposición, el senador Andrés Allamand (RN) recalcó que "la argumentación jurídica que hemos hecho ha dejado en absoluta evidencia que el monopolio sindical que pretende establecer el Gobierno dejando a los sindicatos como los únicos que pueden negociar y dejando a los trabajadores en la situación en la que tienen que pedirle permiso al sindicato o afiliarse al sindicato para obtener la extensión de beneficios y eso es claramente inconstitucional".
Por su parte, el presidente de la UDI, Hernán Larraín, sostuvo que "lo más grave que tiene este proyecto que se hace en el nombre de los trabajadores, de la igualdad, es que les resta derechos a los trabajadores no afiliados, se los quita para la titularidad sindical y se los quita para cuando se llega a acuerdo entre el sindicato y un empleador en la negociación colectiva".
El Tribunal Constitucional deberá emitir antes del 9 de mayo una sentencia en relación a las cuatro objeciones: Titularidad sindical, la extensión de beneficios, la negociación entre sindicatos interempresas y el derecho a la información.