Pedro Pablo Errázuriz dijo en Cooperativa que el plan de contingencia de este lunes fue positivo.
Vaticinó que a la hora de volver a casa habrá menos complicaciones que en la mañana.
El ministro de Transporte, Pedro Pablo Errázuriz, afirmó en Una Nueva Mañana en Cooperativa que el plan de contingencia matinal del "Súper lunes" para evitar el colapso del tránsito fue positivo y que en la tarde se espera que la congestión sea menor.
Una serie de medidas de contingencia se tomaron este primer lunes de marzo para atenuar la congestión producida por el retorno de los santiaguinos a las calles tras las vacaciones y el inicio de las clases en gran parte de los colegios.
"Estuvo bien en el contexto que uno espera. Hubo bastante congestión, pero el tránsito fluyó. La gente funcionó muy bien: hubo pocos accidentes. Esta semana progresivamente va aumentando, porque colegios van iniciando sus clases de manera diferenciada", expuso el secretario de Estado.
Y consultado respecto de lo que puede pasar a la hora en que los santiaguinos deseen volver a casa, afirmó que "en la tarde la concentración de la punta es mucho menor y el impacto es menor, pero se mantienen todas las medidas de contingencia".
Errázuriz recordó que "el año pasado hicimos un primer esbozo de plan de contingencia, este año fue mucho más preparado, con equipo de fiscalización del Ministerio preparados para eliminar autos mal estacionados y camiones en hora peak".
"Lo bueno es que no hubo accidentes. Lo más grave son los autos mal estacionados y accidentes, porque interrumpen el tránsito, al margen de que las calles son estrechas", agregó.
Y en cuanto a los reclamos por las obras que se ejecutan en la capital, planteó que "la gente cree que una obra dura dos meses. El aumento de capacidad de estaciones de metro se demoró un año y tres meses. La obra de Departamental con Tobalaba, que es del Transantiago, muy importante. La lanzamos hace ocho meses, la fecha de entrega es en julio, pero va a terminar antes".
El impacto de los indignados
Entre las situaciones que más afectan el tránsito habitual, Errázuriz identificó una variable específica: "Lo más grave para el transporte público son las tomas de calles y esas peloteras que se producen a veces".
"Siempre hay gente que quiere expresar su opinión y se le olvida el resto del mundo. Respeto mucho el derecho de las personas de expresar sus opiniones, pero muchos lo hacen despreocupándose por los demás. Una toma en la Alameda es muy complicada para la ciudad", manifestó.
