En Orania, en el corazón del Cabo Norte de Sudáfrica, el espíritu del "apartheid" continúa vigente. El símbolo es el "pequeño gigante", un hombre con la camisa remangada, representado en la bandera y en la moneda local. Los habitantes se dedican a trabajos normalmente realizados por asalariados negros en el resto del país. "El objetivo es asegurar una nueva generación de afrikáners puros", dice un residente.