NASA celebra su 50° aniversario opacada por el reciente hito espacial de China
La postergación de la misión de servicio del telescopio Hubble también empaña las bodas de oro.
Se suma a la lista de problemas la falta de presupuesto.
La postergación de la misión de servicio del telescopio Hubble también empaña las bodas de oro.
Se suma a la lista de problemas la falta de presupuesto.
La Agencia Espacial Americana (NASA) celebrará este miércoles medio siglo de misiones y lanzamientos espaciales desde su puesta en marcha el 1 de octubre de 1958.
Sin embargo, el reciente desafío de China, la postergación indefinida de la misión de servicio del telescopio espacial Hubble y la falta de presupuesto -con recortes que amenazan el plan de volver a la Luna y viajar a Marte- empañan las bodas de oro.
"La idea de volver a la Luna y viajar a Marte me parece estupenda, pero sólo hay un pequeño problema: el dinero que necesitamos para lograrlo no ha llegado", ha señalado el astronauta John Glenn, el primer estadounidense que realizó una órbita alrededor de la Tierra, reflejando el ambiente que se respira estos días en la NASA.
Glenn advirtió que la viabilidad del gran proyecto que presentó el presidente George W. Bush en 2004 para establecer bases lunares y desde allí viajar al planeta rojo está seriamente amenazada.
El 50º aniversario del programa espacial estadounidense ha coincidido además con la primera misión china tripulada al espacio y la caminata realizada por un taikonauta, una nueva proeza que refleja las ambiciones cósmicas del país asiático.
China ha anunciado su intención de plantar su propia bandera en la Luna en 2020 y establecer bases en el satélite terrestre, inaugurando así una nueva carrera espacial en la que no está claro si EE.UU. será capaz de mantener su posición de liderazgo frente al desafío emergente del país.
Sumado a esto, la NASA ha aplazado de forma indefinida la misión de servicio al telescopio espacial Hubble que debía iniciar el transbordador "Atlantis" el próximo 14 de octubre.
La medida fue tomada después de detectarse una "anomalía importante" en uno de los sistemas del observatorio espacial puesto en órbita en 1990, la que afectaba a los equipos de almacenamiento y transmisión de datos científicos del Hubble a la Tierra.
La misión del "Atlantis", la quinta de servicio al telescopio, debía durar 11 días e incluía cinco caminatas espaciales para reparar e instalar nuevos equipos en el observatorio.
El propio director general de la NASA, Michael Griffin, reconoció en la gala celebrada en Virginia que a pesar de los éxitos logrados durante los últimos 50 años, no se ha conseguido ni de lejos lo que muchos hubieran deseado.
"Al cumplir nuestro 50º aniversario, no podemos celebrar a la vez el 20º aniversario de la llegada de un astronauta estadounidense a Marte, pero podíamos haberlo hecho", afirmó.
De esta manera, Griffin reconocía implícitamente que tras los días gloriosos del programa "Apollo", la NASA gradualmente perdió el empuje que sin duda le había dado su rivalidad con la Unión Soviética en los tiempos de la Guerra Fría.
En vez de proseguir la conquista del cosmos y concentrarse en intentar pisar el planeta rojo, desvió su atención a misiones de baja órbita con los transbordadores. De hecho, en una entrevista con The New York Times, Griffin ha llegado a reconocer que "los 30 años que nos hemos pasado orbitando alrededor de la Tierra han sido un error".
La gran esperanza de la NASA está puesta ahora en el desarrollo de la futura cápsula "Orion", con un diseño similar a las "Apollo". En principio, esta nave debería estar lista para despegar en 2014, y con ella se pretende volver a la Luna, como paso previo a pisar territorio marciano.
Todo esto, dependerá de que la apuesta económica de EE.UU. en el terreno espacial sea lo suficientemente potente como para evitar que esta vez sean otros los que lleguen antes.