Preocupación ha generado en la localidad de Llico, en la comuna de Arauco, en la Región del Biobío, una varazón de delfines grises desde la tarde noche del jueves.
Fueron alrededor de 25 ejemplares juveniles de la especie Grampus griseus los que arribaron a la caleta de pescadores, quienes, alertados por la situación, tomaron la decisión de ponerlos nuevamente a flote.
La operación de rescate, que contó con la compañía del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), resultó exitosa. Sin embargo, este viernes, un nuevo ejemplar del cetáceo llegó muerto a la costa, confirmó la Dirección Regional del organismo.
El delfín gris fue retirado antes del mediodía por Sernapesca y llevado a una universidad para que sea objeto de estudio y se logre identificar el motivo detrás del fenómeno.
Desde Sernapesca, el jefe del área de Acuicultura, Carlos Navarro, comentó que "se observó un evento de surgencia fuera del Golfo de Arauco, en una ascensión de masas de agua profunda, que son ricas en nutrientes, pobres en oxígeno y esta manada de delfines se encontraba alimentándose, de jibia o calamares que son su dieta predilecta y donde sus presas se vieron atrapadas por esta baja de oxígeno producto del fenómeno de surgencia".
"No les quedó más que entrar al Golfo, los delfines los venían siguiendo y llegaron a este lugar de Llico, que es una playa con baja pendiente y se produjo el fenómeno de que ellos empezaron a varar", agregó.