Escritorio donde Hitler firmó Acuerdo de Munich fue vendido en 423 mil dólares
La casa de subastas Alexander Historical Auctions varios artículos del dictador nazi.
Se había calculado el valor de esta pieza entre 500.000 y 600.000 dólares.
La casa de subastas Alexander Historical Auctions varios artículos del dictador nazi.
Se había calculado el valor de esta pieza entre 500.000 y 600.000 dólares.
El juego de escritorio en el que el dictador nazi Adolf Hitler firmó el Acuerdo de Munich en 1938, gracias al cual Francia y Reino Unido cedieron la región de los Sudetes a Alemania, fue vendido por 423.000 dólares (más de 215,7 millones de pesos) durante una subasta en Stamford, Connecticut.
Así lo confirmó la casa de subastas Alexander Historical Auctions, que llevó a cabo una venta de múltiples pertenencias de Hitler, como un libro contable personal del "Führer" o una fotografía firmada que el dictador envió a la prisión de Landsberg, ambos vendidos por 22.000 dólares (alrededor de 11,2 millones de pesos).
El juego de escritorio, de latón fundido y que según la casa de subastas fue diseñado por el propio Hitler, quien "se jactaba de su conocimiento arquitectónico", recaudó menos de lo previsto por Alexander Historical Auctions, que había calculado el valor de esta pieza entre los 500.000 y los 600.000 dólares (255 y 306 millones de pesos).
En él están inscritas las iniciales del dictador nazi, "AH", presididas por un águila con las alas abiertas que está posada sobre una esvástica, mientras que a los lados cuenta con dos tinteros para cargar la pluma.
Una "reliquia de enorme importancia histórica con grado de museo" y, según la casa de subastas, múltiples imágenes históricas muestran a Hitler junto al entonces dictador italiano Benito Mussolini y a los primeros ministros británico, Neville Chamberlain, y francés, Edouard Daladier, reunidos en la firma del Acuerdo de Múnich alrededor del escritorio, cuyas iniciales "AH" "hacen a la pieza inconfundible".
La venta de ese juego de escritorio se llevó a cabo este jueves, el mismo día en el que la casa de subastas de Nueva York Kestenbaum & Company decidió retirar de su oferta de manuscritos relacionados con el mundo judío un libro que perteneció a Hitler y en el que se contabiliza, ciudad por ciudad y estado por estado, la localización de los judíos de Estados Unidos y Canadá.