"Un minuto de silencio" se ha convertido en la pista de audio que lidera este viernes, el mismo día de su lanzamiento, tanto la lista de ventas de la plataforma iTunes en Austria como la de Amazon en Alemania, ideada como protesta por la situación de los refugiados en el país alpino.
"El debate sobre la inmigración en la sociedad y en la política es tan ruidoso que, ante esto, solo podía callarme y convertir mi silencio en algo sonoro y público", explicó Raoul Haspel, autor austríaco del exitoso "single", en una conversación telefónica con Efe.
Lo que recaude esta canción muda, a la venta por 99 céntimos de euro en la plataforma iTunes y a 1,29 en Amazon, se destinará al campo de refugiados de Traiskirchen, 30 kilómetros al sur de Viena, uno de los focos de la polémica sobre la inmigración en Austria porque miles de personas duermen a la intemperie en los jardines del centro, por falta de espacio en el interior.
El edificio, que cuenta con 1.800 plazas, acoge actualmente a unas 4.000 personas, y la situación ya ha sido denunciada por Amnista Internacional, que mostró su preocupación tras una visita de sus inspectores a principios de agosto.
Problema humanitario
"El fracaso en la atención a los refugiados podría haberse evitado fácilmente, la culpa es principalmente de errores administrativos", alertó la rama austríaca de la organización.
Haspel considera que Austria vive un "tremendo problema humanitario" sobre el que pretende concienciar con sus sesenta segundos sin audio, porque "ya no quedan palabras ni argumentos para hablar sobre esto".
El debate sobre la inmigración ha estado muy presente en los medios de comunicación austríacos.
El artista ha declarado que su objetivo, a corto plazo, es que la gente no tenga que dormir en las actuales condiciones del campo de Traiskirchen y que no les falten alimentos o ropa.
"Es una idea sencilla y genial, estoy orgulloso de lo que hemos logrado juntos", comenta uno de los compradores de la canción en Amazon.