La ONU aplaudió este martes el impacto de la campaña "Kony 2012", lanzada en internet por una ONG contra Joseph Kony, el hombre más buscado en Uganda y líder del Ejército de Resistencia del Señor (LRA, en inglés), y pidió al mundo que no olvide a los niños que sufren las consecuencias de los conflictos.
El video que da vida a la campaña contra el máximo responsable de innumerables secuestros de menores en Uganda y otras zonas de Africa central para hacer de ellos niños soldados se convirtió en una semana en un fenómeno en internet con alrededor de cien millones de visualizaciones en YouTube y Vimeo.
"Es un problema del que eran conscientes muchas personas, pero ahora se han enterado muchas más, lo que es positivo", dijo hoy ante la prensa el portavoz de la ONU, Martin Nesirky, sobre la campaña de la ONG estadounidense Invisible Children (Niños Invisibles) para pedir la detención de Kony, buscado por la Corte Penal Internacional (CPI) desde 2005.
Nesirky leyó además un comunicado de la representante especial del secretario general de la ONU para los Niños en los Conflictos Armados, Radhika Coomaraswamy, quien se mostró "complacida" ante "la viva conversación" que provocó la campaña "sobre un asunto que a menudo no ha centrado la atención de la prensa".
Coomaraswamy señaló que "esa conversación ha llevado a todo el mundo a conocer todos los hechos que rodean a las actividades del LRA y a Joseph Kony", así como a prestar atención "a los cientos de miles de niños que se ven afectados por los conflictos en todo el mundo, no sólo en esa región del mundo".
Paradero desconocido
Kony supuestamente está escondido en zonas selváticas de la República Democrática del Congo (RDC) y la República Centroafricana.
Hasta el momento, la ONG cuenta con el apoyo declarado de muchos rostros conocidos, como Oprah Winfrey, George Clooney y Justin Bieber, y ha conseguido situar durante numerosos días el nombre "Kony" entre las tendencias mundiales de la red social Twitter.
La ONU trabaja desde hace años con numerosas organizaciones para atender a los afectados por las acciones del LRA, grupo que pretende instalar en Uganda un sistema de gobierno basado en los diez mandamientos bíblicos y que ha asesinado y torturado sistemáticamente a civiles desde que empezó a operar.