Inglaterra recibió a Austria en el Estadio Old Trafford de Manchester con la obligación de obtener un triunfo para acercarse a Polonia, actual líder del Grupo 6, y aunque lo logró, tuvo que sufrir más de lo esperado para obtener un ajustado 1-0.
El partido no se presentó fácil para los británicos, debido a que el último resultado clasificatorio fue una derrota por la cuenta mínima ante Irlanda del Norte, con un criticado juego defensivo.
A ese mal escenario, se sumó la ausencia del ariete Wayne Rooney, por suspensión.
Por todo ello, el técnico de los ingleses, el sueco Sven-Goran Ericsson, no dudó en alinear a dos hombres en delantera, Michael Owen y Peter Crouch.
Pese al buen rendimiento exhibido por los atacantes de Newcastle United y Liverpool, respectivamente, fue un volante quien anotó el único gol del partido.
En el minuto 25, Frank Lampard anotó el 1-0 a través de lanzamiento penal.
Aunque pareció que la ventaja encaminaría al elenco anfitrión hacia una victoria sólida, el libreto tuvo dificultades para los birtánicos.
Pese a estar ya sin posibilidades de asistir a Alemania 2006, Austria complicó a los locales. Con un juego físico y veloz, pero sin mayor precisión, los forasteros lograron crear jugadas de peligro.
En el segundo tiempo, la acción más destacada fue la expulsión del volante David Beckham en el minuto 59. El mediocampista de Real Madrid cometió una falta en el minuto 58, por la que recibió tarjeta amarilla de parte del español Luis Medina Cantalejo. Al parecer, el volante reclamó la penalización, y fue expulsado tras "ganarse" la segunda cartulina.
Con la victoria, Inglaterra sumó 22 puntos y se ubicó con buenas posibilidades de asegurar uno de los dos mejores segundos lugares de Europa, que entregan el pase al Mundial.
En la última fecha, la selección inglesa recibirá a Polonia, actuales punteros del Grupo 6, con 24 unidades, en un partido que definirá el primer lugar del grupo, y el pase automático para el Mundial de Alemania 2006. (Cooperativa.cl)