Parlamentarios de la Nueva Mayoría continuaron este jueves con sus críticas a la llamada "ley anticolusión", despachada ayer por el Congreso luego de su aprobación definitiva en el Senado.
La iniciativa aumenta las multas para delitos contra la libre competencia y hace más expeditas las compensaciones a los consumidores. Sin embargo, en su aspecto más polémico, radica la exclusividad de la acción penal en la Fiscalía Nacional Económica una vez que haya sentencias del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia, punto que fue criticado públicamente durante la tramitación por Jorge Abbott, jefe del Ministerio Público.
"Esto va a provocar frustración, porque se ha señalado con enorme claridad que a partir de ahora la colusión va a ameritar cárcel, y yo garantizo que este proyecto vuelve tan difícil aquello, que esas situaciones van a ser excepcionalísimas", afirmó el diputado DC Sergio Espejo.
"Este proyecto tiene letra chica, está lleno de falacias en materia de persecución penal y ha sido una pérdida de tiempo y un engaño a la ciudadanía", remarcó el ex ministro de Transportes y actual vicepresidente de la DC.
El reclamo lo comparte el senador del MAS Alejandro Navarro, quien, junto al RN Alberto Espina, votó en contra de la iniciativa.
Para Navarro, con esta ley "se repite la figura del director del Servicio de Impuestos Internos, donde si el director decide no presentar querellas, el Ministerio Público no puede investigar. Por tanto, eso ha debilitado el proceso que determine la pena de cárcel".