Su acción permitió que dos asaltantes fueran detenidos por la Policía.
El hecho ocurrió en Buenos Aires.
El portero fue identificado como Luis Ferreira.
Un conserje de Buenos Aires mordió a un ladrón que intentó asaltar su edificio junto con un cómplice y, aunque inicialmente ambos lograron escapar, fueron detenidos a los pocos metros por la policía.
Según informaron medios locales, Luis Ferreira mordió en la mano a uno de los asaltantes, quienes lo amenazaron con un arma de fuego e intentaron encerrarlo en una pieza.
"Al gritar uno de ellos me mete la mano en la boca; le calcé el dedo, le agarré los dedos, lo mordí y ahí aflojó", contó el portero, que relató haber empujado, además, a los delincuentes hacia la entrada del edificio.
Los ladrones intentaron fugarse en un taxi, pero fueron interceptados a los pocos metros del lugar por la Policía, que había sido alertada por vecinos que oyeron los gritos del conserje.
