EE.UU. envió a hijos de espías rusos con sus padres
A los mayores de edad se les dio la oportunidad de quedarse, pero decidieron estar con su familia.
El fiscal general de EE.UU. defendió la decisión del intercambio en vez de enjuiciarlos.
A los mayores de edad se les dio la oportunidad de quedarse, pero decidieron estar con su familia.
El fiscal general de EE.UU. defendió la decisión del intercambio en vez de enjuiciarlos.
El gobierno de Estados Unidos envió con sus padres a los hijos de los diez espías intercambiados con Rusia, según indicó este domingo el fiscal general de EE.UU., Eric Holder.
"Todos los hijos han sido repatriados", señaló Holder en una entrevista con el canal de televisión CBS.
Los espías, algunos de los cuales estaban casados entre ellos, tienen siete hijos, la mayoría de ellos ciudadanos estadounidenses, ya que nacieron en este país, por lo que el gobierno dio la opción a los hijos que eran mayores de edad de decidir si querían quedarse o irse, los que finalmente decidieron marcharse junto con sus padres.
El fiscal general declaró que los diez espías, que fueron arrestados el 28 de junio, no pasaron a Rusia ningún secreto durante los más de 10 años que el gobierno de Estados Unidos los tuvo bajo vigilancia, aún así, suponían una "amenaza potencial", por lo que se decidió desmantelar la red.
El fiscal general defendió la decisión de no someterlos a juicio, sino intercambiarlos por cuatro rusos condenados en su país por pasar información a Estados Unidos y Reino Unido, porque el trato le permitió recibir "a cuatro personas en las que tenemos un gran interés".
Tras un acuerdo entre el Kremlin y la Casa Blanca, EE.UU. entregó este viernes a Rusia a diez ciudadanos detenidos por espiar para Moscú, que, por su parte, liberó a cuatro rusos que cumplían condena por trabajar para los servicios secretos norteamericanos, entre ellos Sutiaguin.