Un tribunal español acordó este jueves dejar en libertad provisional al cuñado del rey Felipe VI, Iñaki Urdangarin, con obligación de comparecer el día 1 de cada mes ante la autoridad judicial en su país de residencia, Suiza.
El cuñado del rey fue condenado el 17 de febrero a seis años y tres meses de cárcel por varios delitos en un sumario sobre corrupción en el que su esposa, la infanta Cristina de Borbón, fue absuelta de la acusación de colaboración en un delito fiscal.
La Fiscalía Anticorrupción había solicitado prisión para Urdangarín, eludible con una fianza de 200.000 euros (unos 135.421.035 pesos chilenos), pero las magistradas del tribunal de Palma de Mallorca (islas Baleares) han rechazado esa fórmula.
La sentencia del tribunal, la semana pasada, podrá ser recurrida por las partes ante el Supremo, que será el que finalmente dicte un fallo en firme.
Urdangarin fue sentenciado por delitos de prevaricación continuada, falsedad y malversación de caudales públicos, fraude a la Administración, tráfico de influencias y dos delitos contra Hacienda.
Se trata del conocido "caso Nóos", sobre el supuesto desvío de más de seis millones de euros procedentes de fondos públicos de 2003 a 2006 al Instituto Nóos, entidad sin ánimo de lucro que presidió Urdangarin.
El socio de Urdangarín, Diego Torres, que había sido condenado a ocho años y seis meses de cárcel por varios delitos, tampoco tendrá que ir a la cárcel hasta la sentencia del Supremo, aunque el tribunal hoy le retiró el pasaporte y le prohíbe salir de España.