El misionero John Allen Chau, de 26 años, puso en riesgo a una de las tribus más antiguas del mundo.
Hizo dos viajes a la isla Sentinel del Norte.
El misionero John Allen Chau fue asesinado el 17 de noviembre luego de entrar a la isla prohibida Sentinel del Norte, en el archipiélago de Andamán y Nicobar, en el este de India. La historia cada vez revela más información.
El diario local Hindustan Times recoge declaraciones de los tres pescadores quien describieron cómo Chau se sacó la ropa para quedar sólo en calzoncillos negros e intentar ser aceptado por la tribu.
El misionero de 26 años quebrantó varias leyes y puso en riesgo la salud de los indígenas, con potenciales enfermedades que no han llegado a su territorio. Chau planeó por años la aventura con la que pretendía evangelizar a los sentineleses.
Chau preparó una mochila con su pasaporte, ropa, un botiquín, multivitaminas y otros elementos que escondió en algún lugar de la isla en la noche del 16 de noviembre, ya que su idea era quedarse a vivir con la tribu durante "varios meses".
Al día siguiente, Chau llegó a la orilla de la playa por segunda vez, cuando encontró la muerte en una lluvia de flechas. "Chau temía que lo atacasen de nuevo; así que llevó un herramientas y medicinas para cortar la hemorragia", dijo un local.
Esto coincide con las notas que se encontraron en el bote, según las pesquisas, y que se refieren al incidente que tuvo lugar el día antes. Chau tuvo que nadar unos 300 metros de regreso al barco cuando los sentineleses destruyeron su kayak.
Cuando hombres armados lo atacaron, Chau se alejó gritándoles: "Mi nombre es John, los amo y Jesús los ama". Una flecha atravesó su Biblia, una señal de lo que pasó al día siguiente.
"Tengo miedo, no quiero morir. ¿Sería más prudente irse y dejar que alguien más tome mi lugar para continuar y predicar el mensaje de Dios?", escribió Chau en su diario. Sin embargo, no cejó en su intento y encontró la muerte el 17 de noviembre.
