La detonación masiva de buscapersonas (o "beepers") en el Líbano que este martes causó la muerte de al menos nueve personas y heridas a otras 2.800 en diversos puntos del país se debió a explosivos implantados en estos dispositivos de comunicación, sostuvo hoy el exanalista de la CIA refugiado en Rusia, Edward Snowden.
"Parece que lo más probable es que se trate de dispositivos explosivos implantados (en los buscapersonas) y no de un ataque de piratas informáticos", escribió en la red social X.
Snowden explicó esto en base a la similitud de las graves heridas recibidas por las víctimas.
"Si se tratase de explosiones de baterías recalentadas, tendría lugar un mayor número de incendios menores y fallas", añadió.
El exanalista admitió que Israel podría estar detrás de este ataque y condenó la "irracionalidad" de este tipo de métodos.
"Resulta indistinguible del terrorismo", concluyó.
Sobre las 15:30 de este martes (9:30 hora chilena), un gran número de buscapersonas en manos de miembros de Hizbulá explotaron simultáneamente en varios puntos del Líbano, principalmente en el sur del país y los suburbios meridionales de Beirut, controlados por la formación chií.
El suceso causó la muerte de nueve personas, entre ellos un niño y al menos dos integrantes de Hizbulá, e hirió a más de 2.800 personas, según el último balance ofrecido por el Ministerio de Salud Pública del Líbano.
El Ministerio de Exteriores del Líbano y el grupo chií libanés Hizbulá atribuyeron a Israel la responsabilidad de esta detonación masiva, pero las autoridades de dicho país no se han pronunciado sobre lo ocurrido.