Expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sugirió una nueva línea de investigación dados los escasos avances conseguidos hasta ahora en el caso de los "43 de Ayotzinapa" en México, señalando que eventualmente el bus secuestrado podría haber llevado droga de los carteles.
De acuerdo a la entidad que elaboró un informe cuestionando la versión oficial de las autoridades aztecas, puede que sin saberlo los estudiantes se hayan apoderado de un autobús para viajar de la ciudad natal de Ayotzinapa a Iguala, y la máquina podría haber llevado heroína.
Los especialistas sin embargo criticaron la imposibilidad de entrevistar al personal militar con eventuales testigos de la desaparición.
Igualmente señalaron que los estudiantes secuestrados en septiembre de 2014 "no fueron incinerados en el basurero municipal de Cocula" y "no existe ninguna evidencia que apoye la hipótesis".
El peritaje de un especialista les hace concluir que los testimonios de los presuntos miembros del cártel de Guerreros Unidos "indican eventos que no son posibles dadas las condiciones generadas para lo que sería el fuego mínimo necesario para la cremación de 43 cuerpos".
El CIDH puso en entredicho la "verdad histórica" dada a conocer por el ex fiscal Jesús Murillo, sobre lo ocurrido con "los 43". (Foto: EFE)
La Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) anunció en enero pasado que había llegado a "la verdad histórica" de lo ocurrido la noche del 26 de septiembre a partir de numerosas pruebas científicas y los testimonios de los supuestos autores materiales.
El entonces fiscal, Jesús Murillo, dijo que gracias a 487 dictámenes periciales, 386 declaraciones y dos reconstrucciones de hechos quedaba acreditado que los jóvenes fueron detenidos por policías y entregados a Guerreros Unidos, quienes los asesinaron e incineraron en el basurero, para después arrojar sus restos al río San Juan.
Para el CIDH estas "conclusiones son, en su mayoría, erradas y en muchos casos no emergen de la evidencia material y de su posible interpretación".
El laboratorio de la Universidad de Innsbruck (Austria) que analizó los restos recuperados en el basurero y en el río San Juan solo pudo identificar genéticamente a uno de los 43 jóvenes, Alexander Mora, deduciéndose según Murillo, que la identificación de Mora certifica "que el grupo ahí fue asesinado" porque "él iba con los demás".
"Nadie los protegió"
Los expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos denunciaron que denunciaron igualmente que ninguna fuerza del Estado mexicano actuó para proteger a los estudiantes de Ayotzinapa, "ni agentes federales, ni miembros del Ejército actuaron para protegerlos, a pesar de que tenían conocimiento de los ataques a los jóvenes e incluso estuvieron en algunos escenarios cuando se producían", afirmaron.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) por medio de Claudia Paz, sostuvo que entre el primer y el segundo ataque armado perpetrado por policías de Iguala y Cocula pasaron tres horas "sin que en ningún momento se presentara la Fiscalía, ni servicios periciales para atender a las víctimas, investigar los hechos o levantar la escena del crimen".
Estas acusaciones se suman a las de Human Rights Watch (HRW), que reclamó a México que aborde "inmediatamente" las deficiencias descubiertas en la investigación, así como las denuncias de abusos y obstrucción de la Justicia planteadas por expertos internacionales.
"A pesar de que el mundo tenía los ojos puestos en México, y de los enormes recursos asignados, las autoridades demostraron ser incapaces o no estar dispuestas a llevar a cabo una investigación seria", lamentó el director para las Américas de la organización, José Miguel Vivanco.
HRW reaccionó así a la presentación del citado informe del caso elaborado por el GIEI, que contradice la versión oficial de los hechos.