El procedimiento es una "vulneración del derecho al debido proceso", señalaron.
Solicitaron a la Unión Europea adoptar una posición unánime de rechazo.
La Federación Internacional de los Derechos Humanos (FIDH) condenó este lunes lo que considera una "vulneración del derecho al debido proceso" en el juicio político contra el presidente electo de Paraguay Fernando Lugo, y que culminó el pasado día 22 con su destitución.
En un
comunicado, la Federación expresó sus dudas sobre la "legitimidad" de esa decisión y pidió a la Unión Europea que adopte una posición unánime de rechazo.
Con esta declaración, la FIDH se suma al "rechazo internacional" que ha ocasionado la destitución "expedita" del presidente Fernando Lugo, la que incluso fue interpretada como un golpe de Estado encubierto, e instó a las autoridades paraguayas a tomar todas las medidas necesarias para "garantizar el respeto del orden democrático y del Estado de derecho", añade la nota.
Asimismo, la organización instóa la OEA a que promueva "la normalización de la institucionalidad democrática", de acuerdo con el artículo 20 de la Carta Democrática Interamericana.
"Condenamos la remoción del presidente Fernando Lugo en la medida en que se llevó a cabo de forma apresurada", circunstancia que hace surgir "serias dudas en cuanto a la imparcialidad e independencia de esta decisión", detalla la presidenta de la FIDH, Souhayr Belhassen, en el comunicado.
"Estos hechos son de suma gravedad y representan una seria amenaza para la democracia no sólo en Paraguay, sino en todo el continente", añadió.
La FIDH "considera que se violó el derecho al debido proceso", en particular el derecho a la defensa, ya que el Presidente Lugo "tuvo solamente dos horas, tan sólo un día, tras el anuncio de la decisión del Senado para presentar su defensa, a pesar de que habría solicitado un plazo adicional".
