Rusia ultimó este lunes los preparativos para celebrar el Día de la Victoria sobre la Alemania nazi este martes en medio de estrictas medidas de seguridad, sobre todo junto a la plaza Roja, ante posibles actos de sabotaje ucranianos, mientras redoblaba sus ataques con drones contra Ucrania, donde no menguan los combates.
Por primera vez en muchos años, el escenario de la tradicional parada militar para celebrar la Victoria, que en Rusia se festeja el 9 y no el 8 de mayo debido a la diferencia horaria, ha sido cerrado a cal y canto durante dos semanas, algo que no ocurrió incluso cuando a los desfiles asistían líderes de talla mundial.
Los efectivos de la Policía y la Guardia Nacional fueron puestos en guardia permanente y sus mandos cancelaron todos los permisos y vacaciones del personal.
LOS DRONES, LA GRAN AMENAZA
Las medidas extraordinarias de seguridad fueron adoptadas el 26 de abril, mucho antes de que el miércoles pasado dos drones estallaran junto a la cúpula de Palacio del Senado del Kremlin, ataque del que Rusia no titubeó en acusar a Ucrania y cuyas imágenes conmocionaron el país.
En los días anteriores, las autoridades rusas había informado del avistamiento y de la caída de drones supuestamente ucranianos en los alrededores de Moscú.
A comienzos de abril, el empresario ucraniano Volodímir Yatsenko ofreció una recompensa de 20 millones de grivna, más de 500.000 dólares, al equipo que pueda posar un dron en la plaza Roja el 9 de mayo.
Tras el incidente de los drones en el Kremlin, Moscú, San Petersburgo y, luego, más de la mitad de las regiones del país prohibieron los vuelos de estos aparatos.
Entre las propuestas para redoblar la defensa de infraestructuras importantes como el Kremlin, destacó por lo curiosa la del vicepresidente del Comité de Defensa de la Duma o Cámara de Diputados de Rusia, Alexéi Zhuravliov, quien sugirió crear "escuadrillas de águilas interceptoras" para combatir a los drones.
PUTIN, ACOMPAÑADO DE LÍDERES DE EX REPUBLICAS SOVIÉTICAS
Tal y como establece el protocolo, el presidente ruso, Vladímir Putin, presidirá la parada militar y pronunciará una alocución desde la tribuna de la plaza Roja, donde estará acompañado de los líderes de seis antiguas repúblicas soviéticas: Kirguistán, Tayikistán, Kazajistán, Uzbekistán, Armenia y Bielorrusia.
Putin envió hoy un mensaje de felicitación a los jefes de Estado de Azerbaiyán, Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán, Uzbekistán, Abjasia y Osetia del Sur y "a los pueblos de Georgia y Moldavia".
Por motivos de seguridad, las paradas militares fueron suspendidas en más de una veintena de ciudades rusas, así como en las regiones fronterizas con Ucrania y en la anexionada península de Crimea.