El excabo de Carabineros Sebastián Zamora, acusado de empujar a un adolescente de 17 años desde el puente Pío Nono hacia el río Mapocho en medio de una protesta en Plaza Baquedano en octubre de 2020, rechazó el enjuiciamiento abreviado propuesto por la Fiscalía en el marco del caso.
La salida alternativa implicaba la declaración de culpabilidad del sospechoso en el delito de homicidio frustrado y evitar así un juicio oral, pero esto fue desestimado por la defensa del imputado.
Desde que ocurrieron los hechos, Zamora, dado de baja por ocultar que portaba una cámara personal, afirma que es inocente.
"La defensa no otorgó su conformidad con el procedimiento abreviado, porque implicaba aceptar los hechos propuestos por la Fiscalía, de los cuales existe controversia: mi representado, en el ejercicio de sus funciones como carabinero, procedía a detener al joven que se encontraba en situación de flagrancia, jamás a empujarlo (...). Por eso, instaremos por su absolución en juicio o una calificación jurídica distinta, más adecuada a la realidad de las circunstancias", dijo Alejandro Peña, abogado del excarabinero, a El Mercurio.
De acuerdo al diario, la estrategia de la defensa busca refutar la tesis de la fiscal Ximena Chong de que la arremetida policial del 2 de octubre de 2020 sobre el puente Pío Nono fue un homicidio frustrado.
La Fiscalía pide ocho años de cárcel para Zamora por la caída del adolescente, quien resultó con sus dos muñecas quebradas, un traumatismo encéfalo craneano (TEC) y una contusión en la base del pulmón derecho.
El pasado 22 de enero, la Corte de Apelaciones de Santiago resolvió reintegrar a la causa 16 fotografías del informe Gesto-Motor excluidas en mayo por petición de los querellantes.
Con ese informe de la defensa, los representantes del excarabinero buscan refutar la teoría del caso de Chong y sostener que el cabo hizo movimientos para atrapar y no para empujar al adolescente.