Carlos Herrera Jiménez, ex militar condenado por el crimen de Tucapel Jiménez y del carpintero Juan Alegría, se mostró contrariado por el homenaje que se realizó a favor de Miguel Krassnoff en el Club Providencia.
Además, cuestionó la tesis del ex brigadier del Ejército y miembro de la DINA, quien se declara inocente de todos los crímenes que se le imputan y que lo tienen condenado a 147 años de cárcel, instándolo a asumir su responsabilidad.
"No resulta creíble y menos lógico, que el Poder Judicial se haya equivocado en más de 20 oportunidades al dictar sentencia condenatoria en contra del brigadier", indicó a Cambio 21.
Herrera Jiménez recalcó que "los militares presos lo estamos por haber muerto a personas".
El ex uniformado destaca que los oficiales finalmente no asumieron su responsabilidad en los crímenes cometidos.
"Hay más suboficiales que oficiales presos, areciera que nadie comandó el combate a la subversión que, por cierto, la hubo en Chile. La gran mayoría de los oficiales, al momento de deponer judicialmente, o eran analistas o se desempeñaron como funcionarios administrativos o bien repartían el rancho", señaló con ironía.
"Fuimos el brazo armado de la derecha "
En las declaraciones al semanario, el asesino de Tucapel Jiménez también tuvo palabras duras para la derecha al asegurar que "ciertamente fuimos el brazo armado de la derecha económica. Qué duda cabe".
"Quizás por ello ahora nos desprecian, atávicamente este sector político se ha servido de los militares. La historia es pródiga en señalar los hechos que así los señalan", sentenció.
Herrera Jiménez también reiteró su arrepentimiento por su participación en crímenes del líder sindicalista y Juan Alegría, y repitió que obedeció las órdenes de sus superiores que le convencieron de que estaba eliminando enemigos de la patria.
El ex CNI acusó en varias oportunidades a los mandos del Ejército de la época y a la Dirección de Inteligencia del Ejército (DINE) de haber abandonado a los subalternos en estos procesos.