La ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá (PPD), defendió el texto final de la controversial Ley Naín-Retamal, que fue despachada este miércoles por el Congreso, y aseguró que permitirá tener un control de la acción policial y su legítima defensa.
La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó esta tarde, en último trámite y con amplias mayorías, el proyecto que le remitió el Senado, que de madrugada viabilizó el proyecto en una extensa sesión, tras incorporar varias indicaciones parlamentarias y del Gobierno, sobre todo referentes a la legítima defensa de las policías.
Tras la votación, Tohá explicó que "lo que hace es que cuando un policía o una policía hace uso del arma en defensa propia o de un tercero porque está en riesgo su vida o su integridad personal, para empezar a analizar el caso se va a asumir que, siendo un policía, debiera haber operado de acuerdo con los principios profesionales".
"Pero la investigación puede demostrar lo contrario: si muestra que se pasaron a llevar los protocolos, los límites, que se abusó, esa persona (el policía) va a queda igualmente condenada, no ha cambiado el tipo penal que establece cuándo se abusó. Lo que cambia es el proceso con que se investiga, no se parte desconfiando como actualmente sucede", aclaró.
Tohá admitió que "algunas personas han entendido que este proyecto implica una laxitud para ocupar las armas, o un cambio en los tipos penales que definen cuándo fue correcto o incorrecto el uso del arma, y este proyecto no se refiere a eso".
En ese sentido, consideró que la ley "cumple los estándares de una policía democrática".
"Tenemos observaciones sobre muchos de sus elementos, pero permite un control. Y para ello la ley (que crea el) Ministerio de Seguridad y las cámaras corporales van a ser un elemento muy importante", relevó.
Destacó asimismo que la propuesta que apuntaba a "eximir la responsabilidad de mando afortunadamente quedó fuera del proyecto en el trabajo que se hizo, entre otras cosas".
Desestimó, además, que el Presidente Gabriel Boric vete la ley. El texto resultante "se basa en un acuerdo que se construyó transversalmente en el Senado con todos los sectores, y como ministros ayudamos y promovimos activamente que pasara. Y como ministros somos mandatados por el Presidente de la República. Se responde a sí misma la situación dados estos antecedentes", sostuvo.
De todos modos, el diputado comunista Boris Barrera hizo reserva de constitucionalidad y luego confirmó que Apruebo Dignidad, detractor de lo relativo a la legítima defensa, llevará la ley del Tribunal Constitucional.
Al respecto, la jefa de gabinete sostuvo que acudir al TC "es un derecho de los parlamentarios; cada vez que ellos hacen uso de esta facultad, en esta oportunidad y en las otras, siempre decimos que está en el ámbito de sus competencias".
