En El Primer Café de Cooperativa, el exministro Cristián Monckeberg (RN) apuntó que la incongruencia entre las declaraciones del Gobierno sobre el caso de violación y abuso sexual contra Manuel Monsalve reflejan una actitud de "sálvese quien pueda" de sus autoridades.
El otrora titular de la Segpres aseveró que la gestión inicial de la denuncia "lógicamente tiene consecuencias políticas, y cuesta mucho salir de ello, porque además, el paso siguiente es que tenemos que enfrentar esto con la verdad, y yo lo que veo es el 'sálvese quien pueda' (...) cuando yo quiero decir la verdad, la coordino, no para decir mentiras, sino que para saber cómo la decimos, cómo lo enfrentamos, y aquí se ve que ni siquiera hay una coordinación mínima".
"Mire la bomba que tiraron", acotó Monckeberg, en referencia a la recién revelada declaración del actual subsecretario del Interior, Luis Cordero, quien habló ante Fiscalía sobre el posible uso de gastos reservados por parte de Monsalve la noche de los hechos investigados.
"Sigue sin haber coordinación. ¿Cómo no olfatear que el tema de los gastos reservados se va a venir, cuando se dice que este señor pagó la cuenta en efectivo, 150 lucas? Yo no ando en la calle con 150 lucas", fustigó el opositor, antes de ofrecer "una humilde sugerencia al Gobierno: planificar el futuro y dejar de hablar de esto todo el día".
Por su parte, Máximo Pavez, uno de los vicepresidentes de la UDI, manifestó que "avalo la tesis del pacto de silencio, no en el entendido de que se hayan concertado para ocultar el delito de violación, pero de que las conversaciones se fueron dando en torno a que esto pasara para después de las elecciones. De eso no tengo pruebas, pero ninguna duda".
"Cuando una autoridad va a renunciar, eso se sabe: se empieza a preparar el traspaso, a cancelar la agenda, y el Gobierno siguió trabajando como si esto no se fuera a saber, y eso es lo que avala esta tesis", insistió el exsubsecretario de la Segpres.
Eyzaguirre: "Quieren dar un planchazo al Gobierno"
Desde el oficialismo, el exministro Nicolás Eyzaguirre (PPD) reafirmó que hubiese preferido que el imputado dejara La Moneda el día en que se conoció la denuncia, "pero de ahí a tirar la hipótesis de que esto fue concertado, de que fue una maniobra para ocultar frente a las elecciones, eso no está para nada probado. Creo que si hubiera sacado inmediatamente a Monsalve, el Gobierno se habría anotado un tremendo poroto".
Por lo anterior, "creo que es obvio que esto se está escalando por razones únicamente políticas, y con ningún afán real de resolver el problema", e incluso acusó que el objetivo es "darle un planchazo al Gobierno, y de paso, a la ministra (del Interior, Carolina) Tohá, que podría ser una excelente candidata a la Presidencia de la República".
Finalmente, el otrora canciller Ignacio Walker (ex-DC) coincidió con Eyzaguirre en cuanto a que "la acusación de la posible existencia de un pacto de silencio es temeraria, y si no hay una cierta auto-contención, una cierta racionalidad para ubicar las cosas en su verdadera dimensión, estamos realmente en otro país, y en una descomposición de la política brutal", puesto que "un pacto de silencio supone las peores intenciones, supone el ocultamiento".