El Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago desestimó el propósito del Servicio de Impuestos Internos (SII) de forzar un juicio oral en contra de los cinco integrantes de la familia Ossandón Larraín vinculados a la presunta evasión tributaria más grande del último tiempo.
La acusación del órgano apuntaba contra Gabriel Ossandón Valdés, su esposa María Teresa Larraín Troncoso y sus hijos, Bernardo, Gabriel y Teresa por un supuesto perjuicio fiscal superior a los 198 mil millones de pesos.
El SII afirmaba que el delito -al que denominó como "10 veces más grande" que Penta y SQM- se realizaba a través de operaciones de transferencias patrimoniales realizadas hacia la sociedad Real State Golden Investment.
Sin embargo, el fallo judicial de este viernes respaldó la decisión de la Fiscalía Metropolitana Oriente de no perseverar en la indagatoria por falta de antecedentes y evidencias que permitieran formular una acusación pese a que en su momento se les formalizó por delitos tributarios.
"Quedó en evidencia que la pretensión del SII es absurda, a tal punto que todos los impuestos que ha reclamado este caso son impuestos que supuestamente se habrían originado por las actuaciones jurídicas llevadas a cabo por la familia Ossandón", criticó el abogado defensor, Julián López.
"Es absolutamente incomprensible prentender que una maniobra para evadir impuestos haya provocando impuestos y creo que da luces acerca de las debilidades que tiene el SII, no solamente en la parte penal, sino que también en lo que tiene que ver la parte tributaria, es decir, con su pretención de cobrar impuestos", sentenció la defensa.
Ahora la resolución es inapenable, por lo que se acaba la investigación en contra de los Ossandón Larraín.
