A las 10:00 horas de este miércoles la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados inició la sesión destinada a debatir y votar la acusación constitucional presentada por Chile Vamos contra los ministros de la Corte Suprema Sergio Muñoz y Ángela Vivanco.
El libelo, presentado por la derecha, apunta a la causal de notable abandono de deberes e incluye a ambos jueces, por lo que si algún capítulo relacionado con uno fuese aprobado, las consecuencias se extenderían para el otro.
A Muñoz se le acusa de supuestamente haberle filtrado a su hija -la también magistrada Graciel Muñoz- un fallo en acuerdo en el que participó, en 2022, para evitarle un perjuicio económico en un proyecto inmobiliario; lo que él niega. Mientras que a Vivanco, por sus vínculos con el abogado Luis Hermosilla, cuyas actuaciones en ese marco también le han valido un proceso de remoción en el máximo tribunal, que lo resolverá mañana jueves.
El hecho de que dos jueces sean objeto de una misma acusación, pese a que se les señala por hechos distintos, se tomó los primeros minutos como debate reglamentario.
La diputada Lorena Fires (Frente Amplio) aseguró que "estamos ad portas de cometer una grave violación a los derechos humanos de una persona a la que se le imputan cosas", por lo que pidió a la mesa directiva "que actuemos de manera correcta, de acuerdo con el derecho, no con leguleyadas".
"Es como expulsar al arquero por un foul que hace el delantero", ejemplificó con una analogía futbolística el diputado Alberto Undurraga, timonel de la Democracia Cristiana.
"Pero además, en términos políticos, si usted (la presidenta de la Cámara) permite que se voten conjuntamente, está abriendo la puerta para que en este Gobierno y en los futuros gobiernos, ministros de Estado sean acusados de forma conjunta por hechos distintos. Y uno con cosas gravísimas y otro con cosas discutibles", sostuvo.
El escenario eventual de que la acusación sea acogida "no es inocuo", porque el efecto inmediato "si nosotros votamos ha lugar la acusación constitucional, estos ministros quedan suspendidos", secundó la diputada Javiera Morales (FA).
Por su parte, desde la derecha el diputado Luis Sánchez, jefe de la bancada del Partido Republicano, le bajó el perfil y estimó que "si se aprobase la acusación aquí en la Cámara, pasa al Senado y ahí se vota por separado", por lo que cuestionó como un "exceso" que "se venga a sostener acá que hay alguna vulneración a los derechos fundamentales".
DEFENSAS DEDUJERON CUESTIÓN PREVIA
La defensa de Muñoz, a cargo del abogado Jorge Correa Sutil, ha tachado de "inmoral, jurídicamente aberrante y violatorio de derechos humanos" que un mismo libelo apunte a dos supremos por presuntas actuaciones inconstitucionales diferentes. Tal como había anticipado si la acusación no era separada, finalmente dedujo la cuestión previa.
Vivanco, por su parte, es representada por el abogado Juan Carlos Manríquez, quien manifestó en la sesión que la forma en la que está presentado el libelo -luego que algunos diputados manifestaran su opinión respecto al caso-, ya no puede ser dividida su votación.
"No existe regla que permita la separación (de ambas causas), porque si así fuera, la regla de imparcialidad permitiría salvar a uno y sacrificar al otro con la misma acusación, haciendo una distinción arbitraria", dijo el letrado.
En tanto, Correa Sutil señaló que la acusación "es un precedente nefasto para la estabilidad de los Gobiernos de Chile en lo sucesivo. Si este precedente es tolerado por ustedes (los parlamentarios), gabinetes enteros pueden ser acusados por la conducta ilícita de uno de ellos (...). Por eso, ruego que no se establezca" un libelo de esta naturaleza.
Frente a esto, desde el PPD, el diputado Raúl Soto aseguró que "nosotros vamos a votar en contra de la cuestión previa para que pase hacia el Senado y lo vea como jurado, porque es evidente que la maniobra (de la derecha, que incluyó a ambos magistrados en la misma acusación) es mañosa".
Por otro lado, las bancadas de Amarillos, Demócratas e independientes confirmaron su intención de aprobar el libelo.
"Lo que está en juego es la fe pública, así que lo hemos decidido como bancada más allá de los argumentos, que uno los puede escuchar y eventualmente cambiar de opinión. Pero estamos por aprobar las acusaciones en general", dijo el presidente de Amarillos, Andrés Jouannet.
En la víspera, la comisión revisora, de mayoría opositora, visó -por cuatro votos a favor y uno en contra- la procedencia del libelo y recomendó a la Sala que apruebe su admisibilidad. La diputada Sofía Cid (independiente-Republicanos) fue la designada por la instancia para sostener la acusación en el hemiciclo.
Si la Cámara Baja le da luz verde, los ministros de la Suprema quedarán suspendidos de sus cargos mientras el proceso avanza al Senado, que actuará como jurado y deberá definir su futuro.