Estoy en el tribunal porque "mi papá me hacía cosas raras" sostuvo la menor de 12 años.
La hija de Enrique Orellana recalcó que nadie lo ha dicho lo que tiene que declarar.
Los dos juicios anteriores en contra de Enrique Orellana fueron anulados.
Los tres magistrados a cargo del tercer juicio en contra del suspendido ejecutivo del Banco Central, Enrique Orellana, interrogaron en una sala especialmente acondicionada y a través de circuito cerrado de televisión a las hijas del funcionario en el Cuarto Tribunal Oral de Santiago.
Orellana está acusado de violación reiterada de sus tres hijas y este viernes, la mayor de ellas, de 12 años, ratificó la denuncia en contra de su padre por abusos sexuales diciendo que "mi papá me hacía cosas raras".
La menor también reveló los ataques sexuales y señaló que nadie lo ha dicho lo que tiene que declarar, desligándose de la acusación de la defensa que todo este caso es una estrategia de la ex esposa del ejecutivo por la frustración provocada por la separación.
Los jueces transmiten, a través de un sistema de audio, las preguntas del fiscal Patricio Macaya, en primer término, del abogado querellante Fernando Monsalve y finalmente del defensor de su padre, Francisco Cox.
A través de este circuito cerrado de televisión se trata de no revictimizar a las tres menores, no interferir con su tratamiento sicológico y que no vuelvan a repetir esta experiencia, por lo que los jueces ordenaron que los medios de comunicación no pueden reproducir las imágenes ni el sonido del interrogatorio.
Versiones dispares de abogados
A juicio del abogado querellante, Fernando Monsalve, las declaraciones de las hijas de Orellana "son claras al manifestar si reconocen la diferencia entre la verdad y la mentira, que esto es una verdad, que han ido recordando en el tiempo. Es propio de los actos de abuso que las menores no relaten todo en el primer acto, van relatando y van recordando el abuso".
Para Monsalve se reafirma la petición del Ministerio Público de 60 años de condena para Orellana, porque "existen tres juicios orales que le están preguntando sobre lo mismo, por lo tanto, creo que ha sido bastante claro el tema y ha solidificado la acusación que hemos presentado".
En la otra vereda, el defensor Francisco Cox manifestó que "ha quedado muy evidente, las niñas han cambiado totalmente sus declaraciones en temas fundamentales, en lugares físicos donde habrían sido víctimas, de abusos en su cuerpo totalmente distintos y asimismo incompatibles con las pruebas periciales incorporadas por el propio Ministerio Público".
"Las declaraciones de la mayor de las niñas no se condicen con lo que estableció el propio perito del Servicio Médico Legal", agregó el abogado Cox.
