Polémica sigue generando en el Gran Concepción el retraso de las obras del Puente Bicentenario a cargo de la empresa Copasa, en un proyecto que involucra una inversión de 36 mil millones de pesos y aunque debía entregarse en diciembre apenas lleva 45 por ciento de realización.
Copasa, según el intendente Rodrigo Díaz, argumenta "algunos problemas de carácter económico", en un escenario que se refleja también en las obras del estadio Ester Roa, también con evidente retraso.
El seremi de Obras Públicas, René Carvajal, admitió esta semana que "el estado de avance del proyecto es de 45 por ciento, en el mejor de los casos", incluyendo el total de la obra que abarca las vias oriente, poniente y sus extensiones.
Según Díaz, se "revisará la situación" siendo la prioridad "asegurar la conectividad y si Copasa puede o no enfrentar las dificultades que sufre". Según la autoridad regional, la vía que conecta con el lado norte sería la única que se habilitaría en plazos breves, aunque se habla de junio próximo.
La evidente transgresión de los plazos establecidos en desmedro de la ciudadanía ha generado el pronunciamiento del alcalde Alvaro Órtiz, los senadores Alejandro Navarro y Jacqueline Van Rysselberghe, aunque nadie asume la responsabilidad por los retrasos.
Por último, la agrupación RedConstruyamos denunció la inexistencia de un proyecto completo de parte de las autoridades y engaños que acusa, "deben ser investigados".