El médico Juan Carlos Ríos, toxicólogo y director del Centro de Información Toxicológica de la Universidad Católica (Cituc), se declaró "impactado" por el fácil acceso que puede tener cualquier persona al "peligroso" cianuro en nuestro país.
Ríos conversó con Una Nueva Mañana sobre el suicidio con cianuro registrado ayer en el Mall Costanera Center, que se suma a otros dos casos registrados este mismo mes -en La Florida y Buin-, a propósito de lo cual Cooperativa hizo un ejercicio donde el periodista Pablo Álvarez constató que su comercialización tiene bajo costo y escasa dificultad: sólo se requiere ser mayor de edad y carné de identidad.
"He quedado impactado con la nota que acaban de mostrar (...) Me llama mucho la atención", dijo el experto, al advertir que "el cianuro es muy tóxico y actúa muy rápido, por lo tanto está dentro de los productos que uno considera como más peligrosos".
"Si la dosis no es tan significativa la ingestión produce síntomas como vómitos y quemaduras, pero si se ingiere una dosis tóxica, la muerte puede venir en minutos. Todo esto hace que sea una sustancia que nosotros catalogamos como muy peligrosa", remarcó.
Reevaluar seguridad
A propósito de los casos referidos el seremi metropolitano de Salud, Carlos Aranda, explicó ayer que el ingreso y acopio del cianuro es fiscalizado por las autoridades sanitarias, pero posteriormente opera bajo una modalidad de "venta libre"; por lo que podrían estudiarse nuevas "restricciones".
Coincidió el doctor Juan Carlos Ríos: "La venta debería estar orientada al uso industrial o profesional. El cianuro tiene usos bien específicos en la minería y en la joyería. No debería salirse de ese grupo".
Para el académico, lo ideal sería "que cuando uno pudiera llamar a algún lugar donde se venda –porque efectivamente tiene la condición libre- la exigencia sea no sólo ser mayor de edad, sino que (se determine) cuál es el rubro para el que va a comprar".
Entre los expertos el problema de cianuro "lo catalogamos como intoxicación emergente, porque ya llevamos varios casos en un periodo muy corto de tiempo. Eso significa que hay un cambio de conducta hacia el producto, y es lo que hay que reevaluar para ver si hay que implementar nuevas medidas", indicó.
El riesgo para los reanimadores
El director del Cituc explicó también en Una Nueva Mañana que, una vez ingerido, "el cianuro genera un efecto de knock out, desploma a la persona", lo que genera un escenario de riesgo para "el reanimador o la persona que puede generar primeros auxilios, que por tratar de reanimar da respiración poca a boca".
"El cianuro es muy estable cuando está en forma sólida, no se vaporiza. En ese sentido, el riesgo es bajo en la manipulación (...) En los casos que hemos visto, los volúmenes son muy pequeños y el principal riesgo (entre quienes están cerca de las víctimas o suicidas) lo tiene el reanimador, porque a veces, porque desconoce la situación", comentó.
En todo caso, indicó que "es muy poco probable" que el reanimador corra riesgo de muerte: "Lo que puede tener son náuseas, vómitos, cefaleas, picor en la zona de la cara, pero es poco probable que pase a mayores, porque la concentración que puede expeler una persona (intoxicada) es baja; generalmente son volúmenes pequeños".
De hecho, "ya a un metro o dos metros de la persona, el riesgo disminuye significativamente", de manera que "no hay que tratar a la persona expuesta como un arma química", sentenció.