Se debe "difundir todo y no solamente aquello que le conviene al Gobierno", advirtió el diputado Henry Leal (UDI) sobre la campaña informativa para el plebiscito de la propuesta de nueva Constitución, proceso que se iniciará posterior al 7 de noviembre, fecha en la que los consejeros le entregarán el texto final al Presidente Gabriel Boric.
Para coordinar la campaña de difusión previo a la votación del 17 de diciembre, desde el Ejecutivo ya se reunieron esta semana con el Servicio Electoral (Servel).
El ente electoral cuenta con un presupuesto de cerca de 800 millones de pesos para desplegarse en cuanto se publique el decreto presidencial que convoque al referéndum, lo que coincidirá con el inicio de la campaña de los comandos A favor y En contra.
Ante este panorama, el diputado Leal señaló que espera que "el Gobierno sea neutro y que se difunda el contenido de las normas jurídicas contenidas en el texto que se va a llevar a plebiscito, que se difunda todo y no solamente aquello que le conviene al Gobierno".
"Respecto de eso vamos a estar muy vigilantes fiscalizando que se cumpla, porque se van a usar recursos de todos los chilenos", adelantó el parlamentario UDI.
En tanto, su par socialista Marcos Ilabaca advirtió que "la obligación número uno del Gobierno hoy es poder generar toda campaña comunicacional pendiente a informar correctamente a la población. Ese es el deber del Gobierno para que la ciudadanía pueda votar informadamente uno de los procesos más importantes de la historia reciente".
CUESTIONAMIENTOS DEL OFICIALISMO Y RESPALDO DE LA OPOSICIÓN
Previo al inicio de ese proceso, el Consejo vivirá el lunes otra jornada clave en su desarrollo: votará el borrador completo que ya fue publicado esta semana, finalizando así las labores de este órgano redactor.
Desde la izquierda persisten los cuestionamientos al texto, sobre todo -acusan- por la falta de acuerdos y de representación; mientras que, por contraparte, en la derecha destacan aspectos positivos de la propuesta.
"Nosotros no logramos llegar a acuerdos y creemos que es difícil ya poder lograr esos acuerdos que los chilenos y chilenas nos pedían. El lunes es la última votación, se vota el texto final, y por supuesto que nosotros, Unidad para Chile, no estamos contentos con el resultado del texto", advirtió la consejera Karen Araya (PC).
"Sentimos que no nos representa, que es un texto de ultraderecha, escrito por los consejeros Republicanos con la ayuda o tal vez con la complicidad de Chile Vamos", acusó la representante del oficialismo.
Por su parte, su par de RN Germán Becker afirmó que "esta es una Constitución moderna que permite el crecimiento del país, que permite el desarrollo, que va a generar inversión porque da seguridades y que esas inversiones justamente van a ser las que van a permitir que desarrollemos bien el Estado Social y Democrático de Derecho".
En opinión de Becker, "los derechos sociales que estamos integrando a esta Constitución, la mayoría requiere recursos y esos recursos se dan en la medida en que haya inversión y que haya crecimiento".