El diputado Rubén Oyarzo anunció su renuncia al Partido de la Gente (PDG) acusando la ausencia de un "proyecto político", la existencia de "chantajes" y realizando un fuerte cuestionamiento a la máxima figura de la tienda: el excandidato presidencial Franco Parisi.
En entrevista publicada este domingo por El Mercurio, el parlamentario señaló que "el partido ahora es más una secta; hay malas prácticas y tenemos un líder que no es líder, que viene a hacer turismo político", en referencia a Parisi, que reside en Estados Unidos.
"Hoy no hay un trabajo coordinado en el partido, lamentablemente. Vemos a una persona que es militante del partido que quiere liderar, pero dice A, nosotros los parlamentarios decimos B y la gente del partido dice C, entonces hay una descoordinación tremenda y, al menos, mi trabajo es estar en el territorio, ver ahí las prioridades que son salud, educación, seguridad, migración", puntualizó Oyarzo.
En esta línea, explicó que la decisión de renunciar al PDG la venía meditando hace un tiempo, dado que "no estábamos en concordancia con el proyecto político que en un inicio era poner en el centro a la gente, ver sus prioridades, estar en terreno, representar a la clase media, la clase media emergente y veíamos que eso lamentablemente se perdía, que era más una secta".
Asimismo, el diputado aseguró que "la política no puede ser el negocio de una persona, si no que tiene que estar a disposición de la gente y eso se perdió (...) no hay un proyecto político en el partido, solo hay negocios y chantajes".
"Llegó la hora de salirse del Partido de la Gente", puntualizó Oyarzo, que explicó que se será parte de "la bancada en la que están Demócratas, PDG e independientes, pero me mantendré independiente trabajando en el territorio".