La iniciativa había sido enviada durante primer Gobierno de Michelle Bachelet.
Sin embargo, el proyecto fue frenado por la administración de Sebastián Piñera.
La reforma permite extinguir derechos de agua y expropiar terrenos o nacionalizar el recurso.
El presidente de la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, Ricardo Rincón (DC), puso nuevamente en la tabla de discusión la reforma constitucional que consagra el agua como "bien nacional de uso público".
La iniciativa había sido enviada al Congreso durante el primer Gobierno de Michelle Bachelet, sin embargo, fue frenada por la administración de Sebastián Piñera e incluso el ex ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, recomendó su rechazo.
Según informa este martes La Tercera, el pasado 15 de abril expuso ante la comisión el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, quien, junto con apoyar la reactivación de este debate, solicitó plazo hasta mediados de junio para introducir ajustes al proyecto.
"Tiene que quedar claro en la Constitución que las aguas son de todos los chilenos, por eso queremos un bien de dominio público, que el Estado pueda disponer de las aguas y no pagar por ellas, determinar los usos prioritarios, considerar los caudales sociales", sentenció el secretario de Estado.
Además, el pasado miércoles inició sus labores el delegado presidencial sobre recursos hídricos, Reynaldo Ruiz de Valdés, quien deberá preparar un informe sobre la escasez de agua en Chile.
Al respecto, el diputado Rincón afirmó al matutino que esperarán el citado informe, pero que "hay ciertas temáticas que son muy importantes para el país. Podemos ir adelantando la discusión, recibiendo opiniones y, tal vez, anticipando conclusiones para zanjar el tema".
La Constitución reconoce derechos particulares sobre las aguas, por lo que la reforma presentada por Bachelet permite extinguir derechos de agua y expropiar terrenos o nacionalizar el recurso y entrega facultades a las autoridades para reservar ciertos caudales.
