Manuela Royo, abogada medioambiental del lonko Alberto Curamil, quien recibió el llamando "Premio Nobel Verde", dijo que el dirigente mapuche está muy contento por este galardón y que, pese a estar privado de libertad, continuará luchando por el medioambiente.
En conversación con "Hablando De", la profesional valoró este galardón internacional que visibiliza la lucha mapuche por la defensa de su territorio.
"Para el equipo que trabaja con Alberto es un reconocimiento muy importante porque en primer lugar visibiliza las demandas, la lucha por el agua, además es como un reconocimiento internacional muy importante cuando en el mismo Chile no existen reconocimientos en torno a las demandas mapuche, no existen reconocimientos internos respecto a la protección de los recursos naturales, entonces es una satisfacción, es un orgullo", dijo Royo.
"Él está muy contento, muy conforme, su hija viajó a recibir el premio, el mensaje que él da es que la cárcel no lo va a detener, que va a seguir luchando por el territorio y las aguas y está muy agradecido de todos quienes están apoyando en este proceso", añadió la abogada.
Royo acusa criminalización, por prisión preventiva del lonko
La jurista además explicó aspectos de la prisión preventiva que cumple Curamil al estar imputado por el asalto a una caja de compensación de Galvarino, en abril de 2018, asegurando que hay criminalización de su figura.
"De acuerdo a lo que dice Alberto y que es su teoría del caso, es que aquí existe una criminalización de parte del Estado chileno de quienes son defensores hoy día del territorio y de las aguas", planteó.
"Es importante decirlo, él nunca fue detenido el día de los hechos, fue detenido meses después por una supuesta denuncia anónima que lo sindicaba. Hay muchos antecedentes que son muy espurios y creemos que eso también obedece a la criminalización de la figura del lonko Curamil como un defensor de la tierra y de las aguas", añadió Royo.
Además, Royo reveló que el día del asalto por el que Curamil cumple prisión preventiva incluso se reunió con el lonko, por lo que desestimó los cargos en su contra.
"El día de los hechos que ocurrió ese asalto yo me junté con él, por lo que voy a ser testigo en el caso, por lo que no puedo declarar mucho como abogada defensora, si no como testigo y como abogada en temas medioambientales", expresó.
"Él está en prisión preventiva, por lo tanto pesa sobre él la presunción de inocencia y es algo que se develará en el juicio oral", remarcó.
Curamil está actualmente a la espera del juicio en su contra y de los otros tres imputados -Álvaro Millalén Gutiérrez, José Cáceres Salamanca y Víctor Llanquileo Pilquimán-, para todos los cuales el fiscal del caso, Luis Torres, solicitó penas de 20 años de cárcel por el delito de robo con rehenes.
Otro episodio de la persecución
Asimismo, la abogada expresó que como parte de la persecución que sufre el lonko, un carabinero fue condenado por propinarle una brutal golpiza.
"El año 2014, cuando fue la condena del machi Celestino (Córdoba), Alberto encabezó movilizaciones afuera del tribunal que fueron reprimidas por Carabineros y fue detenido y golpeado brutalmente al interior de un carro policial por lo que presentamos una querella el año pasado", dijo Royo.
"El carabinero que lo había golpeado y que lo había apremiado ilegítimamente reconoció su responsabilidad por lo que fue condenado por el delito de apremios ilegítimos a una sanción de un año de remisión condicional por haber golpeado al lonko mapuche estando detenido y esposado, casi fracturó su cabeza. Eso también es una muestra más de la persecución y la criminalización de la demanda mapuche encarnada en su persona", concluyó.