Tras ocho días en huelga de hambre, las seis dirigentas de los sindicatos de trabajadores eventuales del Puerto de Coronel, en la Región del Biobío, decidieron dar por terminada la medida de presión que realizaron en el marco de negociaciones en el recinto.
La protesta comenzó el jueves de la semana pasada, en la puerta de acceso del principal terminal portuario exportador del sur del país, para alegar que la empresa no ha requerido funcionarios eventuales, algo que había quedado establecido en el acuerdo que puso fin a un paro de más de 50 días en el puerto.
La decisión de las dirigentas se debió al deterioro de su estado de salud y las complicaciones para quedarse en el lugar por las inclemencias del tiempo, dado que ellas estaban al interior de una carpa en la puerta de acceso.
A esto se sumó la intervención de la Iglesia Católica, que finalmente llevó a deponer esta acción de protesta.
De todas maneras, Guillermo Jaque, presidente del Sindicato Número 1 de trabajadores eventuales del Puerto Coronel, les agradeció por "dar una señal muy potente de lo que es el compañerismo, de lo que es la hermandad, de lo que es poner en sacrificio su propia vida para ayudar a sus compañeros en busca de mejora, eso nos da señales que todavía existe nobleza en esta vida"
"Nuestras compañeras siempre han sido el apoyo fundamental para nosotros. Esta huelga que hicieron nos dio un oxígeno en un minuto que estamos decayendo, así muy felices por mis compañeras", destacó el dirigente sindical.
Por el momento, las negociaciones continúan en el Puerto Coronel, aún sin lograr un acuerdo que termine de manera definitiva con el conflicto.