El senador del PPD Guido Girardi manifestó sus reparos al reglamento de la ley de rotulado de alimentos, conocida como "Ley Súper 8", al señalar que esto favorece a las empresas, por lo que anunció que junto a otros legisladores acudirán a la Contraloría para que revise este instructivo.
Según parlamentarios de la Comisión de Salud del Senado, la reglamentación de la ley vulnera los valores fundamentales de la norma aprobada el año pasado, pues consideran que será menos estricta de lo que se buscaba, debido a que sólo los alimentos envasados tendrán la obligación de llevar la rotulación de "alto contenido" en calorías, sal o grasa, lo que dejaría afuera los alimentos que se envasan en los locales, como las conocidas "cajita feliz".
"Lo que hace (el reglamento) es destruir una ley que ya está aprobada en el Congreso, que fue validada, que costó años sacarla adelante, y por la vía de un decreto, de un reglamento que no tiene ninguna potestad, intentan cambiar la ley y eso es ilegal", dijo Girardi.
En tanto, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, manifestó que este requerimiento es absurdo pues el reglamento se encuentra en análisis en la Contraloría, pues ingresó a la entidad reguladora durante la primera semana de julio.
"Yo creo que es un requerimiento absurdo, porque en este momento en la Contraloría (el reglamento) está en control de legalidad, o sea, la pregunta que se responde la Contraloría es si este decreto emanado desde el Ministerio de Salud es legal o no, y mientras la Contraloría no se pronuncie sobre eso, anunciar anticipadamente o inducir al señor contralor que debe razonar de una manera u otra me parece algo abusivo", dijo el secretario de Estado.
La ley de rotulado de alimentos deberá entrar en vigencia el próximo año si es que no hay objeciones del contralor.