El presidente de la Confederación de Funcionarios de la Salud Municipal (Confusam), Esteban Maturana, exculpó de responsabilidad a trabajadores del gremio en relación con el descubrimiento de fichas médicas botadas en las calles de Pudahuel.
Los documentos fueron hallados por un vecino, Enrique Paredes, quien hizo la denuncia a Cooperativa.
Las fichas constaban como emanadas del consultorio Gustavo Molina de la comuna e incluían una serie de datos privados de los pacientes. Este aspecto llevó al ministro Jaime Mañalich a advertir que las penas por este caso podían incluso terminar con privación de libertad, en virtud de la nueva Ley de Derechos y Deberes.
Esteban Maturana dijo haber reunido información con los funcionarios del consultorio, llegando a la convicción de que el problema surgió de una empresa externa de transportes.
"La información que pudimos recabar es que estas fichas tienen más de cinco años de antigüedad y, por ende, son fichas que desde el punto de vista de su bodegaje ya pueden ser eliminadas", explicó Maturana a Cooperativa.
"Estos documentos se estaban eliminando, fueron colocados en unas cajas que estaban siendo transportadas por un camión de una empresa externa y, aparentemente, según la información que nosotros tenemos, esas cajas se cayeron del camión y el conductor no las habría recogido. Por eso quedaron ahí", indicó el dirigente.
"Probablemente el conductor no se percató de que se habían caído las cajas", acotó el líder de la Confusam, cuyas declaraciones coinciden con las de Francisco Miranda, director del Servicio de Salud Metropolitano Occidente, que ayer apuntaba también a un "error en el traslado" de los documentos.
Maturana exculpó a los trabajadores del consultorio que aparece involucrado. (Foto: UPI)