La Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI incautó ocho vehículos y una motocicleta, avaluados en más de 100 millones, que pertenecen a médicos investigados en el megafraude para la comercialización de licencias fraudulentas.
La policía de la Región Metropolitana detalló que los profesionales, junto a una organización criminal, pudieron comprar estos vehículos con dinero de las licencias fraudulentas.
El jefe de la Bridec, el prefecto Marcelo Romero, recordó que los investigados están acusados por fraude de subvenciones, asociación ilícita y lavado de activos.
La incautación de vehículos, añadió el prefecto, "tiene por objeto despojar de su patrimonio, respecto de imputados que eventualmente habrían adquirido estos bienes con recursos que se presume provienen de esta actividad ilícita".
Actualmente siete personas están en prisión preventiva por este caso. La Fiscalía, en diciembre pasado, formalizó a 30 imputados, cuyos líderes son acusados de constituir sociedades médicas y contratar profesionales extranjeros para emitir estos documentos sin atención real ni diagnóistico.
Según informó el Ministerio Público, en los últimos tres años, a julio del 2022, el perjuicio fiscal provocado alcanzó más de 700 mil millones de pesos, equivalente al 25% del presupuesto de Fonasa para pagar licencias.