El presidente de la Asociación de Exportadores de Chile, Ronald Bown, aseguró tras reunirse con el ministro del Interior, Andrés Chadwick, que el Gobierno evalúa la posibilidad de invocar la Ley de Seguridad del Estado por el paro portuario que se desarrolla en gran parte del país.
"Nos interesa una solución prácticamente inmediata", dijo Bown, quien agregó que en una reunión de directorio evaluarán posibles acciones legales contra los trabajadores portuarios.
El paro de los portuarios se inició hace 13 días en Angamos, situado en el norte de Chile, donde los trabajadores paralizaron sus actividades debido a que no están conformes con el tiempo que la empresa le concede para su colación.
Con el correr de los días se fueron sumando los trabajadores de los otros puertos y el único terminal portuario que aún no se ha sumado es el de Valparaíso, situado a 120 kilómetros al noroeste de Santiago.
Estimaciones indican que la huelga de trabajadores, que mantiene paralizado el 85 por ciento de los puertos del país, ha causado pérdidas diarias por 210 millones de dólares.
"Estamos preocupados por esta situación que está afectando las exportaciones e importaciones en los puertos de Talcahuano, Angamos (Mejillones), Iquique y San Antonio", señaló el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Ricardo Mewes.
Pérdidas en San Antonio
Por su parte, el presidente de la Cámara Regional del Comercio de Valparaíso (CRCV), Gustavo González Doorman, advirtió este martes que el paro de actividades en el puerto de San Antonio provoca daños "cuantiosos y crecientes".
Durante 10 días el puerto se ha mantenido sin actividad, por lo que a través de un comunicado, González señaló que "debemos hacer un llamado a revertir con suma urgencia el paro" porque "los daños son cuantiosos y crecientes".
"Recordemos que hace poco menos de seis meses aproximadamente, este puerto de la Región de Valparaíso vivió una situación muy similar, lo cual tiene un impacto importante no solo en las empresas afectadas, sino también en la sociedad", agregó.
Detalló que en San Antonio, como la operación del puerto está paralizada por los trabajadores, "uno de los efectos más visibles es la exportación de fruta, donde se estiman que se provocarían pérdidas directas por 50 millones de dólares.