Dirigentes gremiales y parlamentarios de la UDI salieron a criticar la medida durante la pasada jornada.
El ministro Felipe Larraín afirmó que fueron ellos mismos quienes lo pidieron.
"Parece que siempre todo lo que uno hace es insuficiente… Yo ya estoy acostumbrado", dijo el titular de Hacienda.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, salió a defender la medida impulsada por el Gobierno y que dio a conocer él mismo durante la pasada jornada en La Moneda, que reduce el cilindraje exigido para los taxis de los actuales 1.500 a 1.400 centímetros cúbicos.
La medida apunta a atenuar el impacto de las alzas en el precio de los combustibles, pero fue recibida con críticas por parte del propio gremio de los taxistas, además de parlamentarios de la UDI.
En una actividad, esta mañana, en la Universidad Católica, el jefe de las finanzas públicas aseguró que la medida fue solicitada por los propios gremios y parlamentarios, y consensuada con ellos.
"Parece que siempre todo lo que uno hace es insuficiente... Yo ya estoy acostumbrado a que nos digan que es insuficiente lo que se hace, pero yo quiero simplemente decir una cosa: esto es una petición que fue hecha por parlamentarios y por dirigentes gremiales de los taxistas", dijo Felipe Larraín.
"Si la cosa es muy simple", continuó: "Tener acceso a un taxi o un colectivo de 1.400 centímetros cúbicos es un ahorro en torno a los 700 mil pesos en la inversión y un ahorro entre 8 y 10 por ciento en el consumo de combustible, porque hoy día no hay vehículos del orden de 1.500 centímetros cúbicos o hay muy pocos, por lo tanto, los vehículos están en 1.600 centímetros cúbicos", dijo.
"Eso significa que para lo que recorre en promedio un taxi al mes, que es alrededor de 5.000 kilómetros, el ahorro es del orden de 40 mil pesos", sentenció el secretario de Estado.
