En la celebración realizada en el Circo Massimo, cerca de 600.000 fanáticos recibieron a los seleccionados italianos, que el domingo ganaron la Copa del Mundo al vencer a Francia.

El defensa de la selección italiana fue enfático para calificar como falsa la hipótesis que habla de dichos racistas hacia el volante francés, pero no dio luces respecto de qué fue lo que le dijo.

El organismo reconoció que no se dieron todas las facilidades para que los periodistas pudieran votar después de la final, por lo que muchas preferencias obviaron la expulsión del volante galo.

El representante Alain Migliaccio señaló que el capitán galo no le especificó qué le dijo el italiano Marco Materassi, pero le aseguró que fue algo serio, que se aclarará "la próxima semana".

La organización internacional SOS Racismo señaló que Marco Materazzi llamó "sucio terrorista" al capitán galo antes que éste le propinara un cabezazo en el pecho que le valió la tarjeta roja.

El presidente de Francia homenajeó a la escuadra dirigida por Raymond Domenech en el Palacio del Elíseo, y colmó de elogios al capitán del equipo pese a su expulsión en la final ante Italia.

Liderados por el golazo de Maximiliano Rodríguez en octavos de final ante México, los albicelestes convirtieron los mejores tantos del certamen que coronó a Italia como monarca.

El principal diario deportivo italiano fue presa de la euforia y vio agotados sus 1,7 millones de ejemplares, por lo que debió realizar una nueva tanda con el titular "¡Todo es verdad! Campeones del mundo".

El cabezazo que el capitán de Francia le propinó al defensa italiano se debió a un insulto contra Lila Zidane, según determinó un grupo de expertos en lectura labial a la red Globo .

Mientras parte de la prensa italiana habla de una eventual renuncia a su cargo, el estratega no aclaró si seguirá al mando de los flamantes campeones mundiales, a la espera de tratar su situación este martes.

La prensa gala destacó el esfuerzo de sus jugadores y la clase de su capitán, pero no dudó en criticar el torpe cabezazo sobre Marco Materazzi que puso término a su carrera antes del pitazo final.

Luego de ser eliminada en cuartos de final a manos de Francia, la escuadra verdeamarilla fue reconocida junto a España como las de mejor comportamiento durante el certamen.

A pesar de su inexcusable expulsión en la final, el volante galo superó al italiano Fabio Cannavaro en la votación del Mejor Jugador del Mundial.

Los cinco goles del delantero germano le bastaron para alzarse como el máximo artillero desde el torneo disputado en Chile, donde seis jugadores anotaron en cuatro ocasiones.

El golero -elegido por la FIFA como el mejor de Alemania 2006- le sacó un cabezazo imposible a Zinedine Zidane, que se vistió de villano en el último duelo de su brillante carrera.

Los principales portales de internet de noticias de la península no escatimaron recursos para alabar la consecución del cuarto título mundial de la escuadra azzurra .