Condenan a pareja por muerte de su hija: No creían en los médicos y rezaron para salvarla
La muerte de la recién nacida permitió que su hermana melliza sobreviviera.
La muerte de la recién nacida permitió que su hermana melliza sobreviviera.
Ambos se declararon culpables. Sarah Mitchell, de 25 años, y su marido Travis Lee Mitchell, de 22, fueron condenados a prisión por la muerte de su propia hija, una bebé recién nacida que enfermó y nunca recibió atención médica.
Las creencias religiosas de la pareja, oriunda de Oregon, EE.UU., les hicieron pensar que su hija Ginnifer se recuperaría solo con oraciones. Pero la bebé enfermó y empeoró hasta morir.
Por ello, un juzgado los encontró responsables de homicidio por negligencia.
Sarah había tenido mellizas, por lo que la hermana de Ginnifer también corría riesgo de enfermar. Para su suerte, el médico forense que constató la muerte de la otra niña, decidió llevar a la menor a un centro hospitalario (luego de convencer a la familia), donde se recuperó.
Los Mitchell son miembros de la congregación Seguidores de Cristo, que rechaza la atención médica y cree en la sanación a través de la fe.
Ahora deberán cumplir penas de al menos seis años.
En un caso similar, la hermana de Sarah, Shannon, y su esposo Dale Hickman también fueron condenados a prisión en 2011 por dejar morir a su hijo recién nacido.