El boxeador filipino venció sin apelaciones, por nocáut técnico al norteamericano, tras ocho asaltos.
"Nada que objetar, mi rival fue superior", declaró de la Hoya.
Una vibrante victoria por nocáut técnico fue la que consiguió el campeón del mundo en la categoría ligero de boxeo, el filipino Manny Pacquio ante el estadounidense Oscar de la Hoya, en una pelea considerada como "el combate soñado", y que se celebró en el "Arena Garden" del hotel casino MGM Grand.
El púgil de Filipinas materializó su victoria en el octavo asalto, y dominó de principio a fin el combate ayudado por su velocidad de piernas y puños, y además por la gran potencia de sus golpes.
"Nada que objetar, mi rival fue superior, se preparó como un auténtico campeón y hay que darle todo el mérito", declaró de La Hoya, tras la victoria de su rival.
Pacquiao hizo un boxeo indescifrable para el legendario de La Hoya, 10 veces campeón mundial en seis categorías diferentes, quien no pudo ganar ni uno de los ocho episodios del combate, pactado inicialmente a 12 rounds.
El poder de los golpes de Pacquiao fue demoledor, ya que según números de los jueces acertó 224 de los 585 golpes que lanzó al denominado "Golden Boy", quien también intentó golpear en 402 ocasiones, pero sólo lo consiguió en 83 oportunidades.
De todas maneras los tres jueces del combate habían dado ganador a Pacquiao en los siete últimos asaltos disputados, mientras que de la Hoya había salido airoso del primer round.
Cuando finalizó el combate, de la Hoya, ex campeón del mundo se acercó al filipino y le entregó sus felicitaciones, cortesía que el vencedor respondió con un "sigues siendo mi ídolo".
Tras el combate, Manny Pacquiao dejó su marca en 48-3-2, incluidos 36 fueras de combate, mientras que De la Hoya vio caer su registro a 39-6, y 30 nocáuts.
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| Pacquiao demostró su superioridad ante de la Hoya en Las Vegas. (Foto: EFE) |
