El cuadro dirigido por Luis Aragonés aprovechó cinco minutos de inspiración para vencer por 2-0 a Bélgica y conseguir su primera victoria clasificatoria.
La selección española, con un fútbol irregular y favorecida por las expulsiones de Eric Deflandre y Bart Goor, derrotó a Bélgica por 2-0 para sumar su primer triunfo en las clasificatorias rumbo al Mundial de Alemania 2006.
En el Estadio El Sardinero de Santander, el equipo que presentó el técnico Luis Aragonés alternó momentos brillantes con escaso buen fútbol, pero logró un triunfo que le permite comenzar a avanzar en su camino a tierras germanas.
Apoyada por el buen momento de Xavi Hernández, el conjunto español ofreció una salida rápida que le ofreció la primera gran ocasión a los 35 segundos, gracias a un pase de José Antonio Reyes, pero que Fernando Torres, no alcanzó a conectar.
Pero Bélgica reaccionó. Fue a buscar más arriba al rival y, sobre todo, ajustó la marca sobre Hernández, lo que resultó suficiente para acabar con la euforia española.
Sin una salida del balón tan clara, el conjunto de Aragonés perdió la chispa y, pese a que mantuvo el control del juego, no llegó con claridad, debido a la falta de acierto de Torres, y al desgaste de Raúl fuera del área.
La expulsión de Eric Deflandre, que a los 38' se ganó dos tarjetas, ofreció más espacio al conjunto español, pero el gol no llegó, pese a que el ariete de Atlético de Madrid volvió a quedar solo ante la meta contraria.
Fue su última ocasión, porque al comienzo del segundo tiempo Luis Aragonés lo sustituyó por Albert Luque, y ello le rindió frutos al equipo peninsular a los 59', cuando aprovechó una asistencia de Reyes para abrir la cuenta.
Fue decisivo, porque Bélgica cayó en un abismo. Cuatro minutos después, Michel Salgado dejó a Raúl solo dentro del área para que el atacante de Real Madrid sentenciara el duelo con un remate de cabeza.
Tras cartón, Bart Goor también se fue expulsado y España supo que había ganado el partido. Aragonés retiró a Xavi y la selección no encontró la goleada que buscaba, porque el árbitro anuló un postrero tanto de Raúl, por falta al portero. No importó. Los tres puntos le dan una buena dosis de confianza, sobre la que pretende cimentar el futuro camino al Mundial.
España quedó primera en el Grupo 7, junto a Lituania y Serbia y Montenegro, todos con cuatro puntos. (Agencias)
