Wanderley Luxemburgo se desquitó de algunos miembros del club de Porto Alegre que criticaron los reclamos contra el arbitraje del DT paulista tras ser eliminado en semifinales y les enrostró que están haciendo lo mismo tras perder con Boca Juniors en el arranque de la final continental.
Gremio atribuyó la goleada por 3-0 sufrida a manos de Boca Juniors en el duelo de ida por la final de la Copa Libertadores, a los errores del árbitro y el entrenador de Santos Wanderley Luxemburgo calificó de "llorones" a quienes fueron los verdugos del equipo del chileno Claudio Maldonado en la ronda anterior.
Directivos y miembros de la comisión técnica del conjunto de Porto Alegre acusaron a Luxemburgo de "llorar demasiado", por criticar las decisiones de los jueces en los partidos que determinaron la salida del cuadro paulista en semifinales (0-2 en Porto Alegre y 3-1 en Santos, pero con la desventaja de haber recibido un gol en su cancha).
En la derrota de Santos ante Gremio en Porto Alegre, el ex técnico de Real Madrid condenó el arbitraje por haber marcado un dudoso penal cometido por su defensor Avalos.
Para el partido de vuelta, Luxemburgo criticó la designación de un árbitro argentino, y no brasileño.
En el partido jugado la noche del jueves en Buenos Aires, Gremio alega que fue perjudicado por un gol, el primero, anotado por Rodrigo Palacio en posición de adelanto.
"Lo que ocurrió con Gremio ante Boca fue igual a lo que pasó con Santos en la Copa Libertadores. Dijeron que mis críticas eran lloradera de perdedor. El veneno de Gremio volvió ayer contra ellos", dijo Luxemburgo.
Añadió que la expulsión de Sandro Goiano, también cuestionada por el elenco gaúcho, prueba que él tenía razón cuando exigía actitud más dura de los árbitros que dirigieron los últimos dos partidos de Santos.
"Sandro Goiano cometió siete, ocho faltas contra Santos y ni tarjeta amarilla recibió. Ahora fue expulsado. Eso demuestra que tenía razón cuando alerté a los árbitros", complementó.
Luxemburgo aprovechó para criticar el reglamento de la Copa Libertadores, especialmente lo que a su juicio es "injusta" inclusión y posterior exclusión del valor de los goles marcados a domicilio, diferente de lo que ocurrió en la fase de grupo.
"Un equipo pierde seis partidos (Gremio), el otro cuatro (Boca Juniors). Y nosotros, que apenas perdimos un partido en el torneo, no tuvimos una oportunidad de ir al menos a los penales, ni a una prórroga después de empatar con Gremio en la cuenta global de goles", sostuvo. (EFE)
