Los violentos hinchas ingleses tendrán que responder ante la justicia por los incidentes protagonizados tras la derrota de su selección ante Francia.
Ocho de los 10 hooligans ingleses deportados, tras causar incidentes violentos durante la Eurocopa en Portugal, tendrán que comparecer ante un tribunal británico.
Estos hinchas violentos deberán dar cuentas de su implicación en los desagradables incidentes ocurridos el lunes 14 de junio, tras la derrota de la selección inglesa por 1-2 frente a Francia.
Ante un tribunal de Uxbridge (en Londres), la policía solicitará además que se les impongan prohibiciones para acudir a encuentros internacionales.
A cambio de abandonar Portugal, a siete de estos aficionados violentos se les suspendieron los cargos y tres fueron absueltos por las autoridades lusas.
El jueves por la noche, tras vencer Inglaterra a Suiza por 3-0, decenas de seguidores ingleses se lanzaron a las calles, tanto en Portugal como en el Reino Unido, a celebrar este resultado, y aunque los agentes no registraron esta vez incidentes violentos, sí se produjeron 22 arrestos en Hertfordshire (al norte de Londres).
Algunos británicos se quejaron de haber sido maltratados por los policías portugueses, sin haberse visto envueltos en ningún desorden
público.
"La policía portuguesa la tomó con gente inocente", afirmó John Jackson, un seguidor inglés, que aseguró que estos agentes le "dieron una paliza" y le "escupieron". (EFE)
