"Midnight in Paris" es la cinta en la que la esposa de Nicolas Sarkozy tiene un pequeño papel.
"Quedé encantado con ella", agregó el laureado director de cine.
El director Woody Allen, que dirigió a la primera dama francesa Carla Bruni para la película "Midnight in Paris", dijo estar sorprendido por las columnas que informaban que la cantante fue un eterno problema en el set.
El director, que también desmintió los reportes que decían que a Bruni le tomó 32 tomas poder filmar una escena, se encuentra en el Festival de Cine de Toronto para presentar su tragicomedia "You will meet a tall dark stranger", que se estrena en Estados Unidos la próxima semana.
"Ella no fue ningún problema", dijo Allen, quien filmó "Midnight in Paris" en los meses de verano parisinos, en el que fue su primer rodaje en Francia. "Quedé encantado con ella", agregó.
Allen agregó que con Bruni realizó sus habituales ocho ó 10 tomas, la misma cantidad que con el resto del elenco, que incluye a Adrien Brody, Kathy Bates, Owen Wilson, Marion Cotillard y Rachel McAdams. Dijo que Bruni no fue reemplazada y que sus escenas se mantendrán en la película.
"Esto es 100 por ciento mentira", dijo Allen. "Ella está en la película. Todo lo que filmó está en la película. La amo. Es genial. No es un gran papel, pero es respetable. Todo ha sido inventado. Sí contraté a otra actriz al final de la película para otro papel, totalmente diferente. Ambas están en la película", agregó el neoyorquino.
El director también desmintió los rumores de que el esposo de Bruni, el Presidente francés Nicolas Sarkozy, estuvo molesto con ella cuando la visitó en el set.
"El vino una vez. Le dimos los audífonos para que la escuchara. Estaba encantado. Dijo 'mi esposa es una actriz natural. Es genial'. Lo pasó muy bien", dijo Allen.
"Estoy acostumbrado al periodismo de celebridades y he tenido mi cuota de cosas no ciertas que han sido impresas. Pero esto realmente ha sido de lo más loco", concluyó el director.
