Pekín desmintió la versión de un periodista que sostiene que entregaría al líder terrorista a EE.UU. para garantizar el triunfo de Bush en las elecciones del 2 de noviembre.
El Gobierno de China desmintió noticias aparecidas en la prensa occidental según las cuales Osama bin Laden se encuentra refugiado en el noroeste de ese país, versión que la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino calificó como "irresponsables".
"Puedo asegurar que Bin Laden no está en este país", declaró la portavoz oficial, Zhang Qiyue, en respuesta a una información del periodista británico experto en Medio Oriente Gordon Thomas publicada en distintos medios de comunicación.
Según Thomas, el hombre más buscado por los servicios secretos de Estados Unidos se encuentra "cerca de un lago próximo a la frontera entre China y Pakistán", donde está acompañado por su principal asesor y médico personal, Ayan al Zawahiri, también acusado de terrorismo.
Zhang dijo ignorar "de dónde había sacado el reportero la base para elaborar esa información", en la que se asegura que Bin Laden podría ser detenido poco antes de las elecciones presidenciales estadounidenses del 2 de noviembre.
La zona donde presuntamente se encuentra Bin Laden pertenece a la provincia noroccidental china de Xinjiang, con una importante minoría musulmana y en la que operan grupos separatistas que según Pekín están vinculados a la organización terrorista Al Qaeda.
Según fuentes del Pentágono citadas por Thomas, China pactó con el Gobierno de George W.Bush la entrega de Bin Laden a cambio de acuerdos comerciales y una política menos agresiva de Washington hacia los derechos humanos en el país asiático.
La información va más allá y asegura que fuerzas de Pakistán y Estados Unidos esperan al otro lado de la frontera chino-paquistaní la orden para capturar a Bin Laden en su refugio.
Según Thomas, la captura de Bin Laden, el presunto autor intelectual de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, es la gran partida electoral de Bush para derrotar en las presidenciales al demócrata John Kerry. (EFE)
