Juez ecuatoriano busca procesarlo por las muertes ocurridas en la operación donde murió "Raúl Reyes"
Alvaro Uribe aseguró que Ecuador no tiene jurisdicción sobre las responsabilidades.
El presidente colombiano, Álvaro Uribe Vélez, dijo que la orden de captura dictada por un juez ecuatoriano contra el ex ministro de Defensa Juan Manuel Santos "es una amenaza a los colombianos", y aseguró que ese país no tiene jurisdicción para actuar contra el ex funcionario.
"Este tema es una amenaza a los colombianos. Es una amenaza de negarle a los colombianos el derecho de recuperar la seguridad", dijo Uribe a periodistas tras regresar a Colombia de una gira internacional que incluyó visitas a Panamá y Estados Unidos, país éste en el que se entrevistó con el presidente Barack Obama.
Agregó que no se puede permitir "que se judicialice la libertad", y recalcó: "No podemos permitir que la guerra política que promueve el terrorismo dentro y fuera de Colombia siga creando impunidad para los terroristas".
Enseguida, y a través de un comunicado de prensa, Uribe indicó que la "Operación Fénix", en la que militares colombianos abatieron en territorio ecuatoriano al "número dos" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Luis Edgar Devia, alias "Raúl Reyes", junto a 25 personas más, se hizo "en el marco de la lucha mundial contra el terrorismo".
"Colombia expresa categóricamente la falta de jurisdicción del Estado ecuatoriano en relación con la presunta responsabilidad individual o personal de cualquiera de los servidores o funcionarios públicos que intervinieron en la 'Operación Fénix'", se indicó en un comunicado.
El juez primero de lo Penal de la provincia de Sucumbíos (noreste de Ecuador), Daniel Méndez, emitió una orden de captura contra Santos por la muerte de 26 personas durante la operación que los militares colombianos llevaron a cabo el 1 de marzo de 2008 contra un campamento de las FARC instalado de manera ilegal en territorio del vecino país.
En esa operación murieron "Raúl Reyes" y el ecuatoriano Franklin Aisalla, así como cuatro universitarios mexicanos que se encontraban en el campamento rebelde.
En consecuencia, el Gobierno del presidente Rafael Correa rompió las relaciones diplomáticas con Colombia dos días después del bombardeo por parte de militares colombianos, las cuales siguen aún sin restablecer.
El afectado con la orden de captura, Juan Manuel Santos, así como varios sectores políticos de Colombia, rechazaron la actuación del juez ecuatoriano.
Santos, a través de un comunicado expedido en Londres, ha dicho que "esta es una agresión más de las tantas que ciertas autoridades del Ecuador vienen haciendo no contra Juan Manuel Santos, sino contra Colombia".
