La construcción de nuevos asentamientos no ayuda a su seguridad, estimó.
Sin embargo, este item "es de interés vital", indicó el presidente de EE.UU.
El presidente estadounidense, Barack Obama, calificó de peligrosos los planes israelíes de construir viviendas en el este de Jerusalén, pero aseguró que las relaciones con Israel no están en crisis.
"Creo que la construcción de nuevos asentamientos no ayuda a la seguridad de Israel. Pienso que dificulta la paz con sus vecinos. Disgusta a los palestinos de una forma que podría terminar siendo peligrosa", dijo Obama en una entrevista para la cadena de televisión Fox News.
"La situación en el Oriente Medio es muy difícil y lo he dicho reiteradamente y lo vuelvo a decir: la seguridad de Israel es de interés vital para Estados Unidos y seguiremos garantizando su seguridad", manifestó Obama a la cadena de televisión.
"En algunas ocasiones los amigos tienen discrepancias", manifestó.
Israel anunció la semana pasada la construcción de nuevos asentamientos en momentos en que recibía la visita del vicepresidente de EE.UU., Joseph Biden.
Esos asentamientos se levantarían en una zona de Jerusalén que los palestinos consideran como su capital.
"En un momento en que estamos trabajando para relanzar las negociaciones, estas medidas dificultan nuestros esfuerzos por tener éxito. Ninguna de las partes deberían involucrarse en esfuerzos que pudieran perjudicar unilateralmente las negociaciones", señaló por su parte el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
"Nuestra posición es clara: el estatus de Jerusalén...debe resolverse mediante negociaciones entre las partes", agregó.
