Cerca de 30.000 libros fueron devueltos representando una pérdida de 600 millones de pesos.
Asociación de Apoderados lo calificó como "un acto irracional".
La ministra de Educación, Mónica Jiménez instó a los colegios que no aceptaron los textos de la cartera a cambiar de opinión, luego de que 10 establecimientos particular-subvencionados de la Región Metropolitana decidieran devolverlos y exigírselos a los apoderados.
La decisión significó que 30.000 libros fueron devueltos al Ministerio lo que representa una pérdida de 600 millones de pesos para la cartera.
El subsecretario de Educación, Cristián Martínez dijo que la razón dada por las instituciones era que no siempre entregaban los textos a tiempo y no alcanzaban para todos.
Sin embargo, anunció que "vamos a volver a hacer un nuevo intento, volver a conversar con los sostenedores, invitarlos a recibir y vamos a evaluar qué otra medida podemos tomar respecto a esto que es un derecho de las personas".
En tanto, la Asociación Metropolitana de Padres y Apoderados presidente, Eduardo Catalán, declaró que "nos parece un acto irracional que los colegios devuelvan o los sostenedores no quieran recibir estos libros y hagan que los papás se estén involucrando en la compra ya que estamos en un año difícil, consideramos que hay muchos papás cesante".
Por su parte, el presidente de la Asociación de Colegios particulares, Rodrigo Bosch, afirmó que los papás que ponen a sus hijos en estos colegios saben que estos piden comprar los libros.
