Carabineros de guardia de la Primera Comisaría de Rancagua inventaron el registro de salida de la unidad policial de Jorge Aravena Retamales, el hombre que falleció luego que fuera olvidado al interior de un furgón el pasado 18 de febrero.
Según la investigación que desarrolla el Departamento de Asuntos Internos de la institución, citada este martes por El Mercurio, los encargados de la guardia, encabezados por la subteniente Maritza Díaz, nunca buscaron intensamente al detenido y creyeron que se había escapado.
Debido a esto, y para evitar una severa sanción, los funcionarios policiales habrían redactaro un acta de liberación de Aravena, en la que anotaron datos falsos sobre su llegada y salida y, además, falsificaron la firma que el detenido debe estampar al momento de dejar el cuartel, reporta el diario citando fuentes cercanas a la investigación.
El matutino informa que los carabineros también adjuntaron una constancia que indicaba que el fiscal había dado "instrucciones verbales" de liberar al comerciante que fue detenido luego que se negara a pagar la cuenta en un céntrico restaurante de la capital de la Región de O'Higgins.
Sin embargo, al momento de entregar el turno, a eso de las 20:00 horas de aquel día, descubrieron el cadáver de Aravena al interior del vehículo recostado en una especie de asiento que tienen los radiopatrullas en el calabozo para los detenidos, con un polerón como cojín.
La investigación por esta muerte quedó a cargo de la Fiscalía Militar de Rancagua, la que decretó interrogar a todo el personal que pasó esa jornada por la comisaría y pedir los audios de los diálogos entre el vehículo en que fue detenido el comerciante y la Central de Comunicaciones de Carabineros.