El ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson (RD), dijo ser la persona más interesada en que el robo que afectó la semana pasada a las dependencias de su cartera sea esclarecido, y que espera que tantos los autores materiales como los intelectuales sean encontrados y procesados en tribunales.
La noche del miércoles fueron sustraídos 23 computadores y una caja fuerte con documentos desde el ministerio, hecho que fue facilitados por los guardias de turnos, engañados por un sujeto que, mediante llamadas telefónicas y desde la cárcel, se hizo pasar por Jackson: los notebooks fueron encontrados la tarde siguiente, mas la caja sigue con paradero desconocido.
El ministro volvió a comentar el asunto hoy, durante la primera sesión del comité interministerial que encabeza Desarrollo Social -junto a Hacienda, Energía, Salud, Mujer y Educación- para definir lineamientos de política social del Gobierno tras los resultados de la encuesta Casen.
"En mi caso fue una suplantación de identidad a mi persona, por tanto soy el más interesado en que esto pueda esclarecerse, de tal manera que la opinión pública tenga todos los antecedentes", comentó hoy el ministro.
En ese sentido, enfatizó que "vamos a apoyar el trabajo de la Fiscalía y todas las instituciones, para que tanto los autores materiales como los autores intelectuales puedan ser llevados a la justicia y tengan las mayores sanciones posibles".
Consultado sobre el daño que le ha provocado el caso Democracia Viva al Gobierno, Jackson se remitió a apoyar lo que dijo su par de Justicia: "Eso es algo que el ministro (Luis) Cordero lo ha hecho de manera muy explícita y es algo que todo el Gobierno apoya, no solamente un ministerio, todo el Gobierno apoya las declaraciones del ministro Cordero".
Una vez fue conocido el robo, Jackson deslizó inicialmente que el "sospechoso" robo tenía características similares a "una señal política"; tesis que usó después la oposición para acusar una presunta vinculación con el caso convenios, en que Revolución Democrática -partido del que el ministro es fundador- es el principal involucrado y que también ha salpicado a Desarrollo Social. Luego de todo, el Gobierno considera que fue un "delito común".
La causa ya tiene dos formalizados: Miguel Ángel Apablaza Suárez, el reo que suplantó la identidad del titular, y su abuela Elena Rojas Crespo (60 años), quien fue hallado con los computadores en su poder.
De todos modos, el hecho ha reavivado los emplazamientos a La Moneda para que Jackson salga del gabinete, e incluso la UDI congeló sus diálogos políticos con el Ejecutivo mientras aquello no ocurra.
